El Síndic de Greuges de la Comunitat Valenciana, Ángel Luna. Foto: EFE/KAI FÖRSTERLINGCASTELLÓ (EP). El síndic de Greuges de la Comunitat Valenciana, Ángel Luna, ha decidido abrir una queja de oficio a la Conselleria de Educación, Universidades y Empleo con el fin de "investigar y supervisar" las incidencias en las adjudicaciones de las plazas de profesorado en los centros docentes públicos en el inicio de curso escolar 2023-2024.
La actuación del Síndic, que también tiene la condición de Defensor de los Derechos de la Infancia y Adolescencia, persigue "averiguar si se han vulnerado los derechos constitucionales y estatutarios de los menores a una educación de calidad e igualitaria".
En consecuencia, esta institución ha solicitado a la Conselleria de Educación información sobre las siguientes cuestiones si las plantillas de personal docente del curso 2023-2024 de los centros públicos a fecha actual están cubiertas y, en caso negativo, la previsión temporal para subsanar esta deficiencia.
También se interesa por la relación de las plazas vacantes sin cubrir existentes en la actualidad, determinada por centro docente público; la relación de las plazas actualmente sin cubrir por bajas o ausencias del personal titular de las mismas y las causas en los retrasos en los procesos de adjudicación de puestos docentes --tanto de personal interino, adjudicaciones de destino para funcionarios de carrera y personal en prácticas o procesos de estabilización--.
El defensor del pueblo valenciano solicita igualmente datos sobre las medidas adoptadas para solventar los obstáculos que han impedido cubrir las plazas, una "concreta previsión temporal" en su caso, para cubrir los puestos de docentes vacantes y si el profesorado especialista de Formación Profesional se ha incorporado a los centros. En caso negativo, también se pide la previsión temporal.
La relación de preguntas del Síndic incluye también "si está prevista la incorporación de personal docente en los cursos de 1º, 2º y 3º de Educación Secundaria Obligatoria para dar cobertura a la ampliación del horario lectivo en dos horas". De no ser así, interroga por las medidas adoptadas o previstas para garantizar la formación al alumnado durante estas horas.
Finalmente, pide información acerca de las acciones adoptadas y previstas para que el alumnado recupere las clases que se han dejado de impartir desde el inicio del curso por falta de profesorado.
A partir de ahora, apuntan desde la institución, la administración educativa debe responder al Síndic con la información solicitada en el plazo de un mes, que podrá ser ampliado a otro más si lo solicita de forma justificada.
El conseller de Educación, José Antonio Rovira, ha señalado este viernes que ya no hay errores en las listas de adjudicaciones de plazas a docentes aprobadas y que se han solucionado los problemas.
Rovira ha realizado estas declaraciones ante los medios antes de asistir a la apertura del nuevo curso de la Universitat Jaume I de Castelló.
"Esas listas tenían que haber estado publicadas hace un par de días y retrasamos la publicación por este asunto, incluso hubo algún sindicato que nos dijo que volviéramos al sistema anterior de adjudicaciones presenciales, pero al final solucionamos los problemas", ha dicho.
El problema -según el conseller- "viene de un sistema informático obsoleto que no recoge los cambios que ha habido este año y no estaba preparado". "Ya lo hemos solucionado y ayer publicamos las más de 2.000 vacantes que quedaban de una plantilla de 81.000 personas, por lo que desde el primer día los centros estaban prácticamente al 98 o 99 por cien de su plantilla", ha añadido.
Por otra parte, preguntado por el hecho de que algunos institutos de Castellón, por sumar dos horas de más a algunos cursos, hayan tenido que modificar algunas rutas escolares, el conseller ha recordado que "por una sentencia del TSJ se eliminaron dos horas de unos programas interdisciplinares, pero el anterior gobierno hizo las plantillas contando con esas dos horas".
"Nosotros decicimos que ya que había profesorado para dar dos horas era mejor, por ejemplo, en primero de la ESO, un refuerzo de inglés y matemáticas, dejando siempre la autonomía de cada centro para decidir qué materia se impulsaba", ha subrayado.
Finalmente, Rovira ha reiterado que quieren eliminar "lo más rápido posible" la "incongruencia" de que "aquellos sitios que están planteados como castellano hablantes y los chavales estén exentos de dar la asignatura de valenciano se les obligue a que las asignaturas de historia o matemáticas tengan que darla en valenciano".
"Lo que sería positivo es que esos alumnos estudiaran la asignatura de valenciano, pero no como hacía el anterior gobierno, que mantenía la exención del valenciano pero les obligaba a dar la historia o las matemáticas en valenciano, pues eso no tiene en absoluto ningún sentido, y eso es lo que vamos a eliminar", ha concluido.
