CASTELLÓ (EFE). El ex entrenador del Castellón, Rubén Torrecilla, publicó este martes una carta de despedida en la que desvela que se marcha “con la espina de no poder terminar este ilusionante proyecto” y en la que se despide de todas las personas del club y de su entorno, a excepción de los dirigentes y dirección deportiva.
Torrecilla, que fue destituido el 19 de diciembre con el equipo albinegro en segunda posición de su grupo de Primera RFEF, afirmó que esta temporada llegó al CD Castellón con la misma ilusión que cuando llegó como jugador, "para conseguir el objetivo del ascenso que tanto se merece”, aseguró.
“He trabajado cada día por y para este grandísimo club con la profesionalidad que se merece (…), pero me llevo muchos grandísimos momentos y personas maravillosas que han estado conmigo en este corto proceso”, agregó.
A su cuerpo técnico le dio las gracias por su profesionalidad y trabajar cada día con esa ilusión de ver crecer al equipo mientras que de los jugadores dijo que “como entrenador os digo que he disfrutado y me siento muy orgulloso de veros cada día entrenar y competir, y del grandísimo grupo que hemos conformado en muy poco tiempo. Seguid así que ahí radica nuestro éxito”.
Torrecilla también se acordó del personal de oficina, lavandería y jardineros, sobre los que dijo que ha sido un placer conocerlos porque son "grandes personas" y que, aunque estén en un segundo plano, su trabajo les facilita a los jugadores y técnicos el día a día en el club, mientras que agradeció a los medios de comunicación su trato y cercanía.
Sobre la afición manifestó que se siente "muy orgulloso" de ver cómo ha apoyado al equipo. "Muchas gracias por vuestro trato y cariño hacia mí y hacia el equipo. Sois el corazón de este club y ahora más que nunca este grandísimo equipo os necesita y no tengo duda de que estaréis ahí para ayudarlos y entre todos conseguiréis el objetivo”, añadió.
“Y no me quiero olvidar de mi familia, mi mujer y mi hija, que habéis hecho un esfuerzo grandísimo por adaptaros en muy poco tiempo a una nueva ciudad y apoyarme cada día como lo habéis hecho. Gracias. Desde la distancia seguiré siendo un orellut más”, finalizó su carta de despedida.