CASTELLÓ. Benicàssim inaugura la agenda turístico-cultural. El pasado fin de semana empezó el ciclo de cine en versión original que, junto a las visitas guiadas y teatralizadas, completan una amplia agenda que estará a disposición de vecinos y visitantes permitiendo disfrutar de la historia y la naturaleza de la ciudad.
Este domingo, 12 de febrero, a las 11:00 horas tendrá lugar la visita teatralizada de Villa Elisa. Bajo el título “De fiesta local en las Villas de Benicàssim”, en la que los asistentes podrán disfrutar de la preparación de las fiestas en las Villas en los locos años 20 de la mano de un sirviente. La historia transcurre por las estancias de la majestuosa Villa Elisa en la que el sirviente, muy a su pesar, deberá hacer caso a las infinitas chifladuras de su maniática y vanidosa dueña de la casa.
“Se trata de una forma divertida y didáctica de acercar al público la historia de los inicios de Benicàssim como destino turístico a principios del pasado siglo; también nos permite poner en valor el extraordinario patrimonio arquitectónico que suponen hoy el singular paseo de las villas de Benicàssim”, ha destacado la edil de Turismo del Ayuntamiento de Benicàssim, Elena Llobell.
Las entradas a la visita teatralizada, en la que no está permitido llevar animales de compañía excepto perros guía o de asistencia y puede comprarse a través de la Oficinas de Turismo Benicàssim y en la web.
Además, el 26 de febrero tendrá lugar la visita guiada para descubrir las vistas panorámicas de Benicàssim. Permitirá adentrarse en el parque natural del Desert de les Palmes de la mano de un intérprete del paisaje que, en un sencillo recorrido senderista, descubrirá a los que decidan apuntarse los secretos naturales y culturales del más emblemático de este espacio protegido benicense.
En esta visita de “Benicàssim desde las Alturas” sale del parking del Monasterio Carmelita a las 10:30 del domingo en la que se recorrerán un total de 4 kilómetros. Esta ruta catalogada de dificultad baja-moderada está recomendada para familias senderistas y tiene una duración de 3 horas “una manera diferente de ver y conocer Benicàssim”, ha concluido Llobell.