Seis institutos valencianos participan durante el mes de marzo en esta prueba experimental

Educación acerca el nuevo modelo de EBAU a 150 alumnos de la Comunitat con un estudio piloto

19/02/2023 - 

CASTELLÓ. El Ministerio de Educación sigue avanzando para introducir la nueva Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU). Tal y como anunció la ministra, Pilar Alegría, la idea es que en verano de 2028 esta nueva prueba esté totalmente consolidada. Aunque para eso es necesario ir acercando los nuevos exámenes de forma paulatina a los estudiantes y el profesorado.

Precisamente, a partir de este mes de marzo, el Ministerio de Educación llevará a cabo un estudio piloto en seis centros educativos de la Comunitat Valenciana, para testar y acercar los nuevos modelos de examen al alumnado de primero de bachillerato, ya que cabe recordar que los alumnos y alumnas que cursen actualmente segundo de bachiller no verán reflejado ningún cambio en las pruebas del próximo mes de junio. Los cambios irán introduciéndose a partir del curso 2023-2024 y afectarán a los que ahora cursan 1º de bachillerato.

En concreto, alrededor de 150 alumnos de seis centros de educación secundaria de la Comunitat Valenciana realizarán esta prueba piloto, siendo 1.500 estudiantes de 50 institutos en el cómputo nacional. Los centros de la Comunitat en los que se realizará esta prueba todavía no están determinados, pero han sido las propias autonomías las que, siguiendo los criterios marcados por el Ministerio, han escogido los institutos más idóneos para su realización.

Lengua Castellana y Matemáticas

Según apunta la Conselleria de Educación, en cada uno de estos seis centros valencianos realizarán la prueba una muestra de 25 alumnos y alumnas, que realizarán los exámenes nuevos de las materias de Lengua Castellana y Matemáticas. Cabe recordar que se trata de una prueba piloto que los alumnos realizarán de forma anónima y que no contará para nada en su expediente académico

Lo que se pretende con esta prueba experimental es testar, analizar el buen funcionamiento, adecuación, validez y fiabilidad de las pruebas en el momento de su implantación, así como la adaptación y satisfacción del alumnado con el modelo de ejercicio, la fiabilidad de la corrección y el modelo de opcionalidad. 

Los modelos de las pruebas, las guías de corrección y las rúbricas se han elaborado a manos de un grupo de expertos y expertas y, según señala el departamento que dirige Raquel Tamarit, se dedicarán al menos tres correctores o correctoras por prueba para hacer un análisis de fiabilidad e interpretación de las rúbricas. Asimismo, también se realizarán entrevistas con el alumnado que ha participado para evaluar el grado de adaptación y satisfacción de las pruebas.

Noticias relacionadas

next