CASTELLÓ. Las candidaturas al Congreso y al Senado con vistas a las generales se han convertido en un marrón para el PSPV de Castellón. Tanto es así que el Comité Provincial extraordinario de este miércoles no entrará a valorar las decenas de propuestas que tendrá encima de la mesa de las agrupaciones locales. Los máximos órganos de dirección (la Ejecutiva Provincial es el otro) se limitarán a compilar las numerosas sugerencias formalizadas hasta este martes para elevarlas a País y a la Federal, que será en última instancia la que decidirá. No habrá listados estructurados numéricamente con sus correspondientes primeros espadas. Simplemente se trasladarán a València y Madrid relaciones de nombres ordenadas alfabéticamente.
La decisión de no mojarse obedece a la imposibilidad de celebrar asambleas con arreglo a lo que marcan los estatutos. Por la falta de tiempo, la práctica totalidad de los colectivos municipales ha tenido que improvisar al no poder convocar a la militancia, de un día para otro, a fin de conocer su opinión mediante votaciones. En municipios pequeños, sí que ha habido la alternativa de organizar cónclaves exprés. Sin embargo, en los medianos y grandes ha resultado misión imposible.
Ante este contratiempo, muchos han optado por delegar en sus Ejecutivas las propuestas. Otros, como el caso de Castelló ciudad, han apostado por permitir a cualquier afiliado que plantea por correo electrónico sus preferencias. Todos esos emails se recopilarán posteriormente, de manera que desde la secretaría de organización se elaborarán los listados con todos los nombres. Esta fórmula invita a que un simpatizante pueda enviar multitud de nombres. Por ejemplo, los 402 que aparecen en el censo.
Fuentes de la Ejecutiva Provincial admiten que la relación de postulantes será extensa en el momento que se hable sobre esta cuestión en el Comité de este miércoles. Algunos candidatos (o candidatas) confirmados son los actuales diputados nacionales Susana Ros y Germán Renau y los senadores Artemi Rallo y Ana Belén Edo. A ellos se han sumado Rocío Ibáñez, alcaldesa de Altura, para la Cámara Baja, y María Victoria Garrido, para la Alta. Ambas han sido proyectadas por Navajas. También se ha sumado a la carrera electoral Adrián Sorribes, de Nules, que aspira a formar parte de la candidatura al Senado.
Otros nombres que circulan en los mentideros socialistas son la primera munícipe en funciones de la capital de la Plana, Amparo Marco, y el secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer. En su momento también se especuló con el alcalde de Vila-real, José Benlloch, pero nada más trascender su nombre a los medios él mismo se autodescartó a través de un comunicado.
La pelea entre los barones del PSPV va más allá de integrar las candidaturas. También hay codazos por encabezarlas, especialmente la del Congreso. El crecimiento en las urnas del PP y Vox y la irrupción de la marca Sumar (en coalición con Compromís o Podemos) vislumbra un mapa en el reparto de los cinco diputados por Castellón muy distinto al que hubo en los anteriores comicios.
Hace cuatro años, los socialistas lograron dos parlamentarios como fuerza más votada, por delante de populares, morados y la formación de extrema derecha, que lograron uno cada uno. Para las elecciones del 23J, se contempla dentro de lo posible que la derecha obtenga algún representante más. De ahí la importancia de ser el número uno, condición que asumió la citada Ros en las dos generales que se celebraron en 2019.
Las dudas igualmente surgen en el Senado. A la provincia le corresponden cuatro por elección directa (luego están los territoriales). Estos cuatro se distribuyen de la siguiente manera: el PSOE tiene dos (los reseñados Rallo y Edo) y el PP, el resto (Salomé Pradas y Vicente Martínez). Varias voces autorizadas apuntan a un cambio, en función de los postulantes, que se votan de manera individual.