CASTELLÓ. El Castellón afronta un mes que puede ser decisivo en muchos aspectos relacionados con su futuro en la competición liguera, con cuatro partidos trascendentes en su objetivo de mantenerse en la pelea por los puestos de promoción de ascenso. Sus rivales serán Real Madrid Castilla, Sabadell, Linense y Andorra.
Lo más importante para el conjunto albinegro es comprobar si la victoria cosechada el pasado viernes ante el Betis Deportivo significa el inicio de una buena dinámica de resultados tras una secuencia de partidos flojos en febrero, o es un mero paréntesis en la tendencia descendente que ha evidenciado en su fútbol.
Y es que el pobre nivel mostrado ante el último clasificado del grupo 2 de Primera RFEF recuerda mucho al equipo que sumó un punto de 12 posibles en las cuatro jornadas anteriores y pone en duda el efecto revitalizador de la victoria cosechada en suelo sevillano. Por ello, los próximos partidos determinarán el estado real del equipo.
Marzo será especialmente importante para el Sergi Escobar, cuya figura ha quedado debilitada por los malos resultados y la triste imagen ofrecida por el equipo en una fase tan importante de la temporada. El técnico almassorense sigue gozando de la confianza de la directiva, al menos oficialmente. Pero su continuidad hasta final de temporada dependerá en gran parte de la capacidad de recuperación que muestre su equipo durante este mes.
Al preparador albinegro le avalan los números, ya que el Castellón sigue cerca de los objetivos que se había fijado el club en verano. Los orelluts se encuentran a dos puntos de los puestos de promoción de ascenso en una clasificación donde nadie está mostrando una gran regularidad. Sin embargo, el mal juego mostrado por el equipo en las últimas jornadas le obliga a encontrar soluciones en un mes decisivo para seguir en la lucha por la promoción de ascenso.