VALÈNCIA. El proceso de desapalancamiento de la banca que opera en la Comunitat Valenciana no se frena. Si a lo largo del primer trimestre del año en curso fueron dos las sucursales que bajaron la persiana -concretamente en Alicante y Castellón-, tal y como contó este diario, entre abril y junio fueron ocho más: cuatro en la provincia de La Plana y otras tantas en la de Valencia, mientras que la provincia alicantina sumó una nueva durante el segundo trimestre.
De este modo son diez oficinas menos en el territorio autonómico durante el primer semestre, según se recoge en el último informe 'Las entidades de depósito en la Comunitat Valenciana' de la conselleria de Hacienda y Modelo Económico de la Generalitat Valenciana'.
"Los cierres de sucursales van a seguir no cabe duda, pero no solo en la Comunitat Valenciana sino en toda España. No habrá que perder de vista los próximos resultados de la banca cotizada -comenzando por Bankinter este próximo jueves- para saber cómo les fue en el tercer trimestre y así calibrar el estado en el que se encuentran". Son palabras de un veterano gestor de fondos de inversión consultado por Valencia Plaza.
Fuente: Generalitat Valenciana
"La banca doméstica -como la europea- tiene a favor la política monetaria porque todavía no han terminado las subidas de los tipos de interés. La inflación sigue sin dar su brazo a torcer y eso significa más alzas de las tasas. Pueden haber pausas, pero no creo que se hayan acabado de cara a los próximos meses", añade.
Pero volviendo a la red comercial de la banca en la Comunitat, comentar que entre enero y junio de 2023 solo la provincia alicantina mantuvo el número de sucursales al cierre de 2022 con 590; mientras que la castellonense pasó de las 214 hasta las 209 y la valenciana de las 850 hasta las 845. Por su parte, el conjunto autonómico ha descendido desde las 1.654 hasta las 1.644.
Ni que decir tiene que se trata de los números más bajos de la serie histórica de la Conselleria de Hacienda y Modelo Económico de la Generalitat Valenciana que se remonta a 1991. Y a un mundo sideral de las que había en pie en 2008 (más de 5.000), el año del estallido de la última gran crisis financiera.
Por otro lado, tal y como sucedió en el primer trimestre, cara y cruz en lo que a la captación de depósitos y concesión de créditos del sector público y privado se refiere. Así, el volumen de depósitos repuntó un 1,65% hasta los 131.842 millones de euros donde las cooperativas de crédito lo hicieron a un mayor ritmo (+2,05%). Todo lo contrario que a nivel nacional, dado que se redujeron un 1,89% hasta 1,48 billones de euros.
Fuente: Generalitat Valenciana
La Comunitat Valenciana se mantuvo en el cuarto puesto español en dicho epígrafe (depósitos) con esos 131.842 millones, que representan una tasa de participación del 8,86%. Por delante siguen Madrid (372.602 millones y un 25,04%), Cataluña (214.212 millones y un 14,40%) y Andalucía (161.669 millones y un 10,87%).
Por su parte, en cuanto a la concesión de créditos por parte de la banca que opera en la autonomía valenciana la caída (-5,94%), hasta los 107.212 millones, fue muy superior a la del -2,52% del total español con 1,23 billones de euros.
También en este apartado la Comunitat no se movió del cuarto peldaño del ranking nacional con esos 107.212 millones, que representaban a junio pasado el 8,68% del total. Madrid, con 361.423 millones y un 29,26% de tasa de participación, lideró por enésima vez el escalafón. El podio lo completaron Cataluña (208.130 millones y un 16,85%) y Andalucía (154.517 millones y un 12,51%).