CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Almenara realizará un estudio de la huella de carbono de la localidad con el objetivo de conocer las emisiones de CO2 que se producen para poder tomar medidas para disminuirlas. Esta medida se enmarca dentro de las que están previstas en el Plan de Acción Para el Clima (PACES) que se está elaborando actualmente.
Esta serie de medidas se enmarcan dentro del compromiso adquirido a través del Pacto de Alcaldías por el Clima y la Energía al cual está adherido el Ayuntamiento de Almenara. Este Pacto de Alcaldías es el principal movimiento europeo de municipios y regiones que han asumido el compromiso voluntario de mejorar la eficiencia energética y utilizar fuentes de energía renovable en sus territorios.
Con la adhesión a este pacto el municipio de Almenara adquirió en su momento el compromiso voluntario de reducir las emisiones de CO2 en un 40% antes de 2030, mejorar la eficiencia energética, utilizar fuentes de energía renovable en sus territorios y desarrollar medidas para adaptarse a las consecuencias del cambio climático.
Para alcanzar estos objetivos se han de realizar diversos estudios para después poder tomar las medidas necesarias. En este sentido, uno de los que se realizarán será la huella de carbono de la localidad, por la que se mide la cantidad de emisiones de gases de efecto invernadero que se producen y se liberan a la atmósfera de manera directa o indirecta por una organización, producto, evento o individuo.
La huella de carbono se emplea como un indicador de sostenibilidad, pues permite cuantificar, evaluar y hacer un seguimiento sobre el impacto que tiene una organización, evento o producto sobre el medio ambiente y su contribución al cambio climático.
Por todo ello, se hará una evaluación de la situación energética del municipio de Almenara, para la que se calcularán los datos por separado del consumo de instalaciones fijas, transporte y electricidad, así como los datos de generación de energía renovable.
Una vez realizada la evaluación, el Ayuntamiento de Almenara, y con los datos en la mano, se estará en disposición de diseñar propuestas de mejora que podrán llevarse a cabo en las instalaciones municipales, elaborando un plan de reducción de emisiones propio para cumplir los objetivos marcados. Así, en este estudio se detallarán las actuaciones de mejora que se puedan acometer para la optimización de la eficiencia energética y el ahorro energético.