La parcela subastada por el Puerto de Castellón, desierta: se esperará alguna oferta durante un año

VALÈNCIA. La subasta abierta hace cuatro meses por el Puerto de Castellón para vender una de sus parcelas no ha obtenido la acogida esperada. La Autoridad Portuaria de Castellón ha tenido que que declarar desierta la enajenación mediante subasta pública de este solar, que ubicado entre la carretera de acceso a la dársena norte y el centro deportivo Impala, cuenta con una superficie de 3.540 metros cuadrados, y por el que nadie ha pujado finalmente.

La parcela en cuestión salió a subasta el pasado mes de octubre por valor de 800.834,06 euros, como publicó Castellón Plaza. Y en el proceso, se exigía una garantía del 5 % del importe -más de 40.000 euros- para participar en la subasta, según lo publicado en el Boletín Oficial del Estado. Sin embargo, la oferta no ha parecido resultar lo suficientemente interesante dado que nadie acudió a la llamada.

Así consta de nuevo en el BOE, donde la Autoridad Portuaria de Castellón ha publicado una resolución de su presidente, Rafael Simó Sancho, que declara desierta la subasta. "Consta que habiendo finalizado el plazo para presentar las proposiciones [...] no se ha presentado ninguna oferta", reza la misma resolución, motivo por el cual el Consejo de Administración, a propuesta de la mesa de contratación, ha declarado desierto el proceso.

Con todo, en la Autoridad Portuaria no tiran la toalla por el momento y continuarán a la espera de posibles ofertas para la compra de estos terrenos. "Durante un año, cualquier interesado en el precio de la subasta podrá adquirirla", explican a este diario fuentes del Puerto, quienes recalcan que "una vez pasado ese tiempo, y en base a lo que suceda, se valorarán las opciones que hay".

Aunque no es habitual encontrarse con la enajenación de terrenos por parte de las administraciones públicas -habitualmente se recurre al formato de la concesión para la implantación de empresas en terrenos portuarios-, en esta ocasión el Puerto de Castellón tiene el objetivo de aportar actividad económica a una zona bien enclavada pero que se encuentra degradada, además de que reportará ingresos extraordinarios a PortCastelló de cara a un período de fuertes inversiones, como apuntaron en su momento desde la Autoridad a este diario.

La parcela está delimitada al este por el acceso al parking y al norte por el propio aparcamiento del centro deportivo Impala, que opera sobre una amplia zona de terreno portuario en régimen de concesión. También al norte, el área a enajenar linda con lo que fuera la entrada a la antigua residencia bancaria Virgen del Carmen, donde los rectores de Impala pretenden desarrollar una ampliación de 18.000 metros cuadrados.