¿Peligra la confluencia?: Podem y EU, en punto muerto en las negociaciones a tres meses del 28M

CASTELLÓ. Podem Castelló y EU siguen en un punto muerto en las negociaciones para reeditar la confluencia. A pesar del interés mostrado por ambas formaciones desde el primer momento para concurrir juntas a las elecciones del 28M, la realidad es que van pasando las semanas y, más allá de acercas posturas, las diferencias continúan sin augurar una entente satisfactoria por las dos partes.

Al margen de coincidir en la necesidad de repetir la convergencia, apenas existen puntos en común después de haber cruzado propuestas. Incluso, a la hora de adoptar acuerdos vinculantes surgen las discrepancias. Mientras la fuerza que lidera Silvia Peris cuenta con libertad para fijar mínimos y máximos, como así decidió el Consell Polític el pasado fin de semana respecto a las grandes ciudades, el partido morado está atado por las directrices marcadas desde Valencia.

Esa desigual estrategia para sentarse a debatir supone un lastre a fin de avanzar con la celeridad que cabría esperar. Tanto es así que ya no existe una fecha límite, dentro de un margen, para sellar el pacto después de haber incumplido la data tope del 28 de febrero. Ante este bloqueo, las perspectivas de un arreglo a corto plazo son poco halagüeñas. Al menos, si no se produce un cambio radical en los próximos días.

La necesidad de sumar juntos

Fuentes cercanas a la negociación apuntan, en cualquier caso, que Podem y EU están condenados a entenderse, ya que no se concibe otra fórmula que la suma de fuerzas para al menos retener uno de los dos concejales que en la actualidad cuenta la confluencia en el Ayuntamiento de la capital de la Plana. Sin embargo, en el caso del partido que encabeza Peris siempre queda el comodín de Compromís, cuya oferta de integración se mantiene abierta en vista de que el plazo dado expira en Magdalena.

Pese a la dificultad para progresar adecuadamente, en las reuniones que se han ido celebrando hasta ahora se han puesto sobre la mesa cuestiones esenciales para la coalición. Por ejemplo, la línea programática o el nombre con el que afrontar los comicios, sin variar el enunciado actual, que bien hubiera podido cambiar tras la presente legislatura.

El verdadero problema para atisbar en el horizonte una solución estriba en la composición de la lista municipal. En concreto, en el orden de los candidatos. Con la premisa de que la candidatura debe ser cremallera y paritaria, el primer obstáculo se plantea con la elección de la cabeza de cartel. Tanto la citada Peris como la portavoz morada, Marisol Barceló, se consideran alcaldables y de esa discusión no hay forma de pasar al siguiente asunto, especialmente cuando, si se produce una concesión no viene acompañada de la correspondiente contrapartida por la otra parte, según apuntan las mismas fuentes.

Una campaña para recoger propuestas

Sea como fuere, la principal prioridad radica en prorrogar otros cuatro años más la convergencia. Prueba de ello es que, con independencia del tira y afloja, ambos partidos han iniciado conjuntamente una campaña de buzoneo, denominada Imprescindible, con el objetivo de explicar los hitos de la coalición.

La ruta informativa pretende, además, porfiar en la marca y el proyecto para movilizar al electorado de cara a la cita con las urnas el 28 de mayo. Solo con esa movilización existe el convencimiento de que será posible conservar representación municipal, más cuando los resultados de las últimas elecciones (2015 y 2019) señalan que para sacar el primer concejal resultará necesario obtener entre 4.000 y 4.500 votos.