Fotos: ANTONIO PRADAS
CASTELLÓ. Vainsa Infraestructuras ha comenzado a vallar la cruz de Ribalta para retirar el monumento a partir de este miércoles. Durante la jornada de este martes operarios de la empresa valenciana han empezado a cercar el perímetro, de manera que a lo largo del día se espera concluir esta fase preliminar de la ejecución.
Fuentes municipales señalan que la idea es que la supresión del vestigio considerado como franquista y su posterior traslado al nuevo emplazamiento, en la explanada de la parroquia Santo Tomás de Villanueva, se realice en un mismo día. Al menos, esa es la pretensión tanto del equipo de gobierno como de la adjudicataria, aunque dependerá del estado de la estructura del lábaro.
Una vez se retire la cruz de Ribalta, se procederá a eliminar la plataforma, lo que permitirá afrontar el resto de fases del proyecto, que contemplan la restitución del jardín que existió en 1926. La ejecución tiene un plazo de seis semanas, con lo que, salvo contratiempo, el Acord de Fadrell cumplirá su compromiso de sacar el monumento del parque antes de concluir el presente mandato.
El concejal de Obras y Proyectos Urbanos, Jose Luis López, ha recalcado que con esta actuación "se da cumplimiento a las leyes en materia de memoria democrática y se recuperará un espacio ahora ocupado por el monumento en esta parte del jardín del parque Ribalta, integrándolo así en el Bien de Interés Cultural". López ha recordado que el proyecto tiene un presupuesto de adjudicación de 58.908,16 euros (impuestos excluidos).
Por su parte, la edil de Memoria Democrática, Verònica Ruiz, ha destacado que "por fin comienzan hoy [este martes] las obras que verdaderamente harán que se retire el monumento de exaltación al franquismo de la vía pública, después de varios procedimientos judiciales, incluso alguna querella y tres licitaciones, cumpliendo así la Ley de Memoria Democrática y la Ley de Memoria Histórica valenciana".
Las mismas fuentes municipales señalan que está previsto que este miércoles se proceda a los trabajos de retirada y traslado de la cruz, que se desarrollarán a lo largo del día y que consistirán en el previo entablillado y sujeción de la estructura, corte del fuste por la base, levantamiento y transporte hasta su colocación en la ubicación escogida por el obispado de la Diócesis de Segorbe-Castellón, al que ha sido cedida la cruz.
Tras esta fase, los trabajos proseguirán con el resto de actuaciones para llevar a término la recuperación de esta zona del parque. Cabe recordar que la actuación prevé que se recupere el jardín en el estado inicial previo a la colocación del citado monumento. Ello incluye la remodelación de los andenes y de los macizos ajardinados.
Los trabajos consistirán en el movimiento de tierras que comprende la eliminación del pavimento existente y la base del mismo hasta llegar a terreno natural a fin de poder conectar el jardín nuevo con el suelo del jardín. A continuación se procederá a las intervenciones en materia de albañilería y riego, con la colocación del bordillo, adoquinados, pavimentos varios y bancos; y la implantación de los mecanismos necesarios para realizar el riego, con conexión al sector de riego existente. En último término se colocará la jardinería con la plantación de árboles, arbustivas y tapizantes con el criterio de su existencia previa o histórica en el parque.
Durante la colocación de las vallas este martes, un hombre ha intentado encadenarse en el monumento para paralizar las obras. Se trata de Javier Torres, presidente de la Plataforma en defensa de la Cruz, que ha sido identificado por la Policía Local tras acceder al recinto.