Los partidos del Botànic entienden que "todas las explicaciones están dadas"
CASTELLÓ (EP). Los grupos del gobierno del Botànic II --PSPV, Compromís y Unides Podem-Esquerra Unida-- en Les Corts han rechazado este jueves la creación de una comisión de investigación para determinar si hubo conflicto de intereses en la operación del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) con un grupo editorial al que pertenece Mediterráneo, en el que el 'president' de la Generalitat y líder del PSPV, Ximo Puig, tiene acciones. Estas formaciones entienden que "todas las explicaciones están dadas".
La propuesta, que partía de Ciudadanos y ha contado con el apoyo del resto de la oposición (PP y Vox), se ha debatido al final del pleno de Les Corts y se ha rechazado con 48 votos en contra y 45 a favor. En este punto se ha ausentado Puig --además de otros consellers-- al tener previamente programada la clausura de un foro organizado por Mediterráneo en Castelló. "Un acto de su propio periódico", como ha denunciado el diputado de Cs Vicente Fernández.
Para justificar su rechazo, el PSPV se basa en las conclusiones de la Abogacía de la Generalitat de que "no hubo conflicto de intereses" y en la "honradez" de Puig, y Compromís y Podem en las explicaciones que dio el director del IVF, Manuel Illueca, en el parlamento. Por contra, PP quiere llegar al origen de las acciones, Cs denuncia las "ganas de esconder la corrupción" y Vox alerta de "una operación similar en Cataluña".
Durante un debate que se ha desarrollado en tono crispado, tanto el síndic de Cs, Toni Cantó, como la de Podem, Naiara Davó, han pedido la palabra: el primero al sentirse aludido por el portavoz socialista, Manolo Mata, cuando ha afirmado que el anterior gobierno del PP contrataba a "actores más o menos simpáticos" para la extinta Canal 9 y campañas, y la segunda para defender a la consellera de Transparencia, Rosa Pérez Garijo (Unides Podem), que había pedido el voto telemático por el accidente que sufrió la semana pasada.
La creación de esta comisión está "más que justificada" para Cs, en el "caso Puig-IVF" por "afectar a la decencia y conciencia de cada uno de los diputados y su posición frente a la búsqueda de la verdad o el apoyo a la mentira". "Quienes no quieren investigar algo en democracia es porque tienen algo que esconder, y eso en política se llama corrupción", ha subrayado Vicente Fernández, ironizando con que Puig pudiera llegar a "votarse a sí mismo la ocultación".
Ciudadanos cree que "no es una cuestión de estética", ante los "más de 600 euros que cobra Puig todos los meses de dividendo" por sus acciones, por lo que rechaza "la imagen bucólica y romántica que pretende transmitir al decir que compró las acciones tras ganar una indemnización por despide".
Pero el 'president', ha advertido el diputado de Cs, "no dice que el 22,5% de Pecsa --editora del diario 'Mediterráneo-- lo compraron dirigentes socialistas" ni que "Ferraz los obligó a cambiarlas cuando vio que la cosa no estaba clara". Por tanto, se ha preguntado "dónde están esas acciones y a quién las vendió o regaló", además de denunciar que "en los últimos cuatro años ha favorecido con 600.000 euros en publicidad institucional a ese medio".
"Esto es más que dos trajes", ha ilustrado el representante del partido 'naranja' en referencia al 'expresident' del PP Francisco Camps, para preguntar a los diputados de Compromís si "se van a poner una camiseta que diga 'Yo tapé la corrupción de Ximo Puig' y van a ser los mamporreros". Mientras, ha garantizado que Cs seguirá "reclamando la verdad en esta tribuna, la prensa y los tribunales".
Y ha ironizado: "Algo huele a podrido en Dinamarca", para tachar a los socios de gobierno de "correveidiles de la mentira" porque "si lo tuvieran todo fetén" apoyarían la investigación para "conocer los tejemanejes de Puig". "Vaya con el viejo demócrata, el periodista del movimiento", ha remachado, advirtiendo que "tiene suerte de estar aforado y de tener una compañera en la Conselleria de Justicia (Gabriela Bravo) que ayuda a esa lentitud en la justicia".
Por parte del PSPV, su portavoz, Manolo Mata, ha defendido a Puig afirmando que es "la persona más honrada" que conoce e insistiendo en que "ha acabado teniendo el 1,17% de las acciones" y "nadie se las va a comprar porque un accionista tiene el 85%, por lo que cree que investigar algo de "hace más de 30 años" es "lo más vergonzoso" que ha visto en años.
Ha recordado cuando el periodista Luis Herrero relató que Puig y él fueron despedidos del diario por "cantar 'La Internacional' el 23-F", frente a las "maniobras mediáticas que hubo después para que ese periódico fuera el más conservador de Castellón, precisamente para fastidiar a Puig" y a la "operación brutal" del 'expresident' del PP Eduardo Zaplana para "comprar una rotativa en Villena que iba a controlar el periódico en Alicante".
El síndic socialista también ha asegurado que el anterior Consell del PP "gastó diez veces más en publicidad institucional" con campos de golf o Terra Mítica y que "utilizaba la tarjeta del IVF para pagar regalos de boda". "¿Saben el daño que hacen a la democracia?", ha preguntado a la oposición, recalcando que estar aforado no significa no poder ser condenado.
De Compromís, Mónica Álvaro se ha limitado a garantizar que las comisiones son necesarias para "dar todas las explicaciones ante cualquier sospecha", aunque en este caso las ven dadas. Eso sí, ha recalcado: "No haremos como el PSPV en el Ayuntamiento de València, no todo vale en campaña", en referencia al apoyo del grupo socialista a la oposición en la investigación del fraude de cuatro millones en la Empresa Municipal de Transportes (EMT).
En la misma línea, Ferran Martínez (Podem) ha hecho hincapié en que el director del IVF dio "todas las explicaciones" en Les Corts, por lo que cree que la oposición "se proclama, fiscal, juez y verdugo sin esperar a ninguna investigación". Ha afeado que se critiquen las acciones de Puig cuando "hay quien cobró 134.000 euros en seis meses o creó una sociedad pantalla para evadir el pago de impuestos". El líder de Cs, Toni Cantó, se ha sentido aludido y le ha invitado a ir a los tribunales si tiene alguna sospecha.
También de la oposición, Rubén Ibáñez (PP) ha criticado que "el actor principal esté comiendo palomitas" y no presente en el debate, lo que ve como "una anomalía democrática". Ha apuntado "dos incógnitas": si las acciones "son suyas realmente" y si "el dinero con el que las pagó era suyo o provenía de una cuenta pública", además de preguntarse "si en la historia de la Generalitat hay un decreto que se haya aprobado en dos meses" como el del IVF.
Por parte de Vox, la diputada Ángeles Criado ha calificado la situación de "engaño y burla para todos los valencianos". "No es una operación única: en Cataluña, el Institut de Finances ha hecho una quita al mismo grupo, es especialmente sospechoso", ha advertido, para dejar caer si "no responderá a la complicidad del Gobierno valenciano y el catalán para sumar esfuerzos en la deriva soberanista".
