CASTELLÓ. La crisis que atraviesa el sector cerámico obligó a una de las compañías líder en fabricación y comercialización de baldosas cerámicas y suelos, el grupo británico Victoria PLC, propietario de la castellonense Keraben, a iniciar un proceso de reorganización interna para mejorar la eficiencia y ahorrar en costes. Una operación donde se enmarca precisamente el cierre de la fábrica de Saloni que demuestra la voluntad de la compañía de mantener los márgenes de beneficio, algo que este mismo viernes confirmó el mismo director ejecutivo de la compañía, Geoff Wilding.
El directivo se pronunció antes de la asamblea general anual sobre las perspectivas del conglomerado británico de cara al próximo año para asegurar a sus accionistas que la firma "continúa cotizando sólidamente" y espera "un aumento sustancial de los beneficios y los flujos de caja", tal como ya adelantó Victoria PLC en sus cuentas anuales sobre el ejercicio 2022 al hablar de su proyección de futuro.
Así pues, a partir de los datos obtenidos durante el primer trimestre de este año, el director ejecutivo aseguró que la marcha de la compañía ha estado "en la línea con el pronóstico de la Junta y con las expectativas" de cara a 2024. En ese sentido, dejó claro que "la demanda se mantiene generalmente estable en todos los mercados del grupo". Un panorama ciertamente positivo en un contexto donde muchas firmas del sector acusan la caída de la demanda y de las exportaciones, y teniendo en cuenta que en 2022 Victoria PLC ya consiguió un record al alcanzar unas ventas de 200 millones de metros cuadrados de pavimento, como publicó Castellón Plaza.
En esta línea, y con una demanda que se mantiene en un contexto complicado, la compañía está trabajando en mantener sus márgenes, que según Wilding están "mejorando" especialmente gracias a "una caída en los costes de suministros". " Nuestro objetivo en el año fiscal 2024 no es perseguir volúmenes sino proteger y mejorar los márgenes", explicó a los accionistas el directivo de la firma, quien aseguró que esta tiene "la capacidad de producción del tamaño adecuado" para ello mientras se puede anticipar "un modesto crecimiento del volumen en los próximos trimestres".
Así pues, explicó que la capacidad de Victoria PLC "para crear productos diseñados al coste". es lo que permite mantener los márgenes y al mismo tiempo seguir satisfaciendo la demanda de los clientes a unos precios determinados. Pero no sólo esto, sino que el proceso de integración que ha realizado la firma en los últimos tiempos también va a tener su repercusión en los próximos beneficios. Por eso, el directivo subrayó que 2024 será un año "de dos mitades, con mayores ganancias en el segundo semestre a medida que las ganancias de productividad derivadas de la finalización de los principales proyectos de integración lleguen a buen término".
Cabe recordar que en sus últimas cuentas, referentes al año 2022, la firma reconocía el proceso de integración que está llevando a cabo con adquisiciones y cierres es "costoso (especialmente en Europa, debido a las indemnizaciones de los trabajadores despedidos), pero es necesario para obtener el máximo valor de los negocios adquiridos". De hecho, esto hizo que el margen de la compañía se redujera ese año del 14,1% el ejercicio anterior al 11,7%.
Aquí, una de las operaciones más importantes es la de Saloni, el cierre de cuya fábrica en Sant Joan de Moró anunció el grupo británico a principios de este año. "Con la inversión que Victoria ha realizado en tecnología de producción en España durante los últimos tres años, hemos podido cerrar la fábrica de Saloni y consolidar la producción en las grandes instalaciones de Keraben e Ibero", explicaba la compañía en ese sentido.
A ello se suman otras operaciones como la compra de la empresa de fabricación de alfombras belga Balta, la integración de la azulejera turca Graniser adquirida en 2022 o la californiana Cali Flooring's. Movimientos que han reducido la plantilla en 1.000 personas "manteniendo" la "capacidad de producción", señala la firma en sus cuentas, según la cual este proceso ha supuesto unos costes excepcionales de 47,6 millones de euros (40,8 millones de libras), que al haberse asumido ya, "serán mínimos" en los próximos años.
Ahora, este viernes el directivo expuso a los accionistas que, la firma ha "logrado una escala que, una vez que se completen los proyectos de integración actuales, resultará en una mayor productividad, una logística más eficiente, una distribución más amplia y menores costes de suministros que casi todos nuestros competidores". Así, se espera "continuará generando retornos enormes para sus accionistas". Este proceso supondrá "de manera conservadora" un "aumento de 20 millones de libras anuales -23,1 millones de euros, al cambio-" en el resultado de la compañía antes de impuestos y amortizaciones. También prevé que el flujo de caja "aumente considerablemente a partir del segundo semestre" conforme se reciban los "beneficios anuales completos de la integración".