CASTELLÓ. La aerolínea Wizz Air ha ha realizado su primer vuelo empleando combustible de aviación sostenible. La compañía ha iniciado las pruebas comerciales haciendo uso de la cadena de suministro de este tipo de carburante, conocido en el mundo de la aviación como SAF. Y lo ha hecho en un vuelo entre Rumanía y España, concretamente con destino al aeropuerto de Castellón.
Fue este miércoles 10 de mayo cuando Wizz Air despegó del aeropuerto de Budapest con pasajeros hacia Castellón, un vuelo donde primera vez utilizó una mezcla de combustible que contenía un 37 % de SAF puro y un 63 % de combustible Jet A1, según ha comunicado la propia compañía, que actualmente opera las rutas entre el aeropuerto de Castellón y Budapest, Bucarest y Katowice.
El proyecto apoya esfuerzos más amplios en la industria de la aviación para reducir las emisiones de CO2 y tiene como objetivo preparar el sistema de suministro de combustible en el aeropuerto de Budapest antes de los mandatos de mezcla de SAF de la UE, que se introducirán en 2025.
El SAF para el suministro de prueba fue producido por la empresa finlandesa Neste a partir de residuos de grasa animal y aceite de cocina usado. El uso de SAF reduce las emisiones de carbono hasta en un 80 % durante el ciclo de vida del combustible en comparación con el uso de combustible fósil para aviones.
La compañía afirma que "lidera la industria con el ejemplo" y opera con las emisiones de carbono "más bajas por pasajero/km en comparación con todas las aerolíneas de la competencia". Para lograr esto, la aerolínea ha invertido "mucho" en su flota agregando aviones nuevos y reemplazando aviones antiguos con el avión Airbus A321neo. Este incorpora la última tecnología, ofrece importantes beneficios ambientales y actualmente puede volar con hasta un 50% de mezcla SAF.
En ese sentido, la directora corporativa y de ESG de Wizz Air, Yvonne Moynihan, dijo que la prueba de SAF "se adelanta a los mandatos legislativos que llegarán en 2025" y "demuestra que la colaboración de la industria es una de las formas más impactantes de abordar el desafío climático actual". "Si bien Wizz Air ya es líder en sostenibilidad con una de las flotas de aviones más jóvenes del mundo y operaciones altamente eficientes, la iniciativa SAF en el aeropuerto de Budapest es un testimonio de nuestra estrategia más amplia, en la que los combustibles alternativos juegan un papel importante", aseguró.
A su juicio, "esto marca un mayor progreso en nuestro compromiso de reducir nuestra intensidad de carbono en un 25 % para 2030 y demuestra que seguimos enfocados en la tecnología y la innovación”.