CASTELLÓ. El Acord de Fadrell se queda a medias en su objetivo de ganar músculo administrativo para culminar su programa antes de las elecciones de mayo. De las tres convocatorias para crear otras tantas jefaturas de sección en el Ayuntamiento de Castelló, solo se cubrirán dos, siempre y cuando los aspirantes lleguen hasta el final del concurso. El departamento de Gobierno Abierto, dependiente de Compromís, acabará el mandato sin responsable de área tras haber sido excluido el único postulante por no cumplir la trayectoria profesional mínima exigida.
En cuanto a los otros dos puestos para asumir las direcciones de la Ciudad Educadora y de Transición Ecológica, se han postulado una y dos candidatos, respectivamente, al cierre del plazo de presentación de solicitudes. Los tres son funcionarios municipales y cuentan con amplia experiencia para ostentar los cargos. Incluso, en el caso de la candidata, Cayetana García-Simón, ha desempeñado la jefatura en los últimos años. Por lo que respecta a los otros dos participantes, Tomás Fabregat y Juan Carlos Sanchis, se trata de dos ingenieros agrónomos que ya trabajan en el consistorio.
La idea del equipo de gobierno radica en culminar los procesos en breve. Ante la necesidad de rematar algunos de los proyectos bandera de las concejalías implicadas, resulta imperativo que los nuevos jefes de sección se incorporen lo antes posible. Al menos, si la pretensión pasa por encarrilar esas acciones de gobierno en los poco más de dos meses que restan para los comicios.
Las tareas ligadas a los puestos van desde la dirección, gestión y coordinación de las unidades adscritas a cada departamento, hasta el seguimiento y control del presupuesto anual y la evaluación de los servicios vinculados. Asimismo, deben ocuparse de la elaboración de propuestas y emisión de informes para agilizar el funcionamiento interno de las distintas concejalías.
La creación de las tres jefaturas es una de las asignaturas pendientes del Fadrell desde prácticamente el inicio de la legislatura. Los tres partidos que componen el ejecutivo local (PSPV, Compromís y Podem-EUPV) acordaron su implantación dentro del organigrama funcionarial del Ayuntamiento a raíz de las postreras modificaciones de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT).
Sin embargo, algunas reticencias internas de una parte de las actuales jefaturas municipales ralentizaron la puesta en marcha de los procedimientos administrativos. Esa oposición se debió a las propias características de las convocatorias, abiertas a funcionarios de otras administraciones, sin facilitar la promoción interna en el consistorio.
Resueltas esas trabas, el Fadrell espera intensificar su capacidad de maniobra en estos meses para impeler nuevas políticas públicas, en la línea de lo desarrollado hasta ahora. La pretensión estriba en cumplir el mayor número posible de medidas contempladas en el documento de gobernanza consensuado en junio de 2019.