Fotos: ANTONIO PRADASCASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló ha comenzado a instalar este lunes tres radares a lo largo de la ciudad... pero no comenzarán a multar hasta septiembre. Asegura el consistorio, además, que los tres "van a ir señalizados", ya que "no tienen afán recaudatorio".
Ubicados en puntos de acceso y de salida del municipio, lo que se busca es más bien poner fin a los accidentes que de manera frecuente se producen por exceso de velocidad. Según ha alertado la Policía Local de Castelló es esta la principal causa por la que se registran siniestros en la localidad. Unos accidentes que pueden ser más peligrosos de lo imaginado.
Señalaba la DGT en una de sus campañas de tráfico que una colisión a 50 km/h equivale a caer desde un tercer piso. Pero además, a partir de esta velocidad es más probable que un peatón atropellado muera a que sobreviva. La proporción de fallecidos se aproxima a un cincuenta por ciento, mientras que si supera los 80 km/h es prácticamente imposible que pueda sobrevivir a causa de las lesiones recibidas.
Los nuevos radares que Castelló ha instalado se ubican en la ronda Norte -en el túnel de salida que conecta con la avenida de Lidón-, en la ronda Sur -en el túnel en dirección a la avenida Valencia, en las cercanías del Pavelló Ciutat de Castelló- y en la avenida Valencia, en dirección al centro de la ciudad. Se trata de tres puntos "conflictivos" donde la velocidad no debería exceder los 60 kilómetros por hora, sin embargo, se ha detectado que muchos conductores alcanzan los 80 km/h... o más.
Frente a ello, el consistorio decidió a finales del año pasado adquirir tres cinemómetros fijos que se suman al radar móvil con el que la Policía Local lleva ya tiempo trabajando para forzar a los conductores a reducir la velocidad. Una compra que, según informó este diario, ha costado al Ayuntamiento cerca de 82.000 euros.
Fotos: ANTONIO PRADAS"Se trata de una herramienta de la que disponen la mayoría de grandes ciudades y que se puede usar en diferentes acciones y campañas", explicaba meses atrás el portavoz del gobierno municipal, José Luis López, quien aseguraba que "la presencia de estos radares se ha demostrado que son efectivos en las campañas de circulación y, sobre todo, que reducen los siniestros". La adquisición fue aprobada en los anteriores presupuestos y su puesta en marcha estaba previsto que fuera por esta temporada.
Concretamente, será a partir de septiembre, en una fecha aún por determinar, cuando los tres radares empiecen a funcionar y, por lo tanto, a multar a quienes excedan la velocidad. Eso sí, hasta entonces continuarán activos los controles de velocidad que la Policía Local realiza en otros puntos de la ciudad, como vías del centro, donde el límite está fijado en 30 kilómetros por hora.
