CASTELLÓ. El modelo educativo de los institutos-escuela se va asentando cada vez más en los colegios de Castellón. De hecho, Castellón es la provincia de la Comunitat Valenciana en la que más centros educativos siguen este modelo, instaurado hasta ahora de forma piloto en varias escuelas del territorio valenciano y que está dando "muy buenos resultados". Tanto es así que la Conselleria de Educación está tramitando una orden para regular y dar forma a este nuevo modelo educativo y prevé sumar un quinto instituto-escuela en Albocàsser.
Según apuntan desde el área que dirige la consellera Raquel Tamarit, con esta orden lo que se pretende es extender, dar estabilidad y consolidar las diferentes experiencias innovadoras que se han puesto en marcha con la implantación de este modelo que da continuidad a la ESO en los colegios de Primaria. Es decir, que en una misma escuela los alumnos y alumnas puedan cursar hasta cuarto curso de la Educación Secundaria Obligatoria.
Por lo que respecta al nuevo instituto-escuela proyectado en Albocàsser, la Conselleria de Educación está planificando con una inversión de alrededor de 7 millones de euros, demoler el actual CEIP Joan Brusca de Albocàsser y construir en su lugar un nuevo instituto-escuela. Esta actuación, prevista dentro del Plan Edificant, incluye el derribo de la actual escuela -que fecha de 1965- y la construcción sobre la misma parcela de un nuevo centro que cuente con un aula de Infantil 2 años, 3 de Infantil (3-5 años), seis de Primaria, cuatro de ESO, gimnasio y un comedor para 250 alumnos en dos turnos dotado de cocina.
Y es que tras varios años funcionando de forma experimental, la Conselleria de Educación prevé ahora regular este sistema y el pasado 3 de febrero publicó el Proyecto de Orden para regular la implantación y reglamentación de los institutos-escuela. Ahora, el borrador de la propuesta de ley está en fase de exposición pública para que el entorno educativo pueda formular aquellas propuestas que puedan mejorarla. Cabe destacar que esta iniciativa ha sido muy bien acogida por parte de las asociaciones de padres y madres, en concreto, la Fampa Castelló-Penyagolosa celebra que la Conselleria desarrolle este nuevo formato en los centros escolares, puesto que se trata de una demanda constate de las AMPA, especialmente en las escuelas de pequeños pueblos.
Cabe recordar que los instituto-escuela son un modelo educativo más bien propio de la educación privada pero que la Conselleria de Educación llevó a los colegios públicos del territorio valenciano de manera experimental hace ya un par de años. Haciendo un repaso, este modelo está instaurado actualmente en siete colegios de la Comunitat Valenciana, cuatro centros en Castellón, dos en Valencia y uno en Alicante.
De hecho, el primero de los instituto-escuela se instauró en el colegio rural CRA Penyagolosa, en Atzeneta del Maestrat, un centro que acoge alumnos de Atzeneta, Benafigos, Vistabella, les Useres y Xodos. Este fue el primer colegio de la Comunitat en aglutinar en un mismo espacio todas las etapas educativas obligatorias. Sin embargo, en el curso 2018-2019, Educación ya autorizó las enseñanzas de ESO en los CEIP Carlos Selma y Guitarrista Tárrega de Castelló de la Plana como herramienta para prevenir el abandono escolar prematuro en entornos socialmente desfavorecidos.
Y es que esta propuesta arrancó inicialmente como medida para prevenir que los escolares de barrios socialmente desfavorecidos dejaran los estudios de forma temprana, puesto que la transición educativa, es decir, el cambio de alumnado del colegio al instituto, genera grandes tasas de abandono educativo temprano y dificulta que esta población desfavorecida complete la etapa de enseñanza obligatoria. Como resultado de esta primera línea de actuación, en este curso 2022-2023 se ha incorporado 1º de la ESO en el CEIP Gaspar Gil Polo de València, que se suma a las medidas tomadas en los colegios de los barrios desfavorecidos de Castelló.
A esta primera línea se le unió una segunda, que es la lucha contra el despoblamiento en las zonas rurales. Y es que al ser Castellón la provincia de la Comunitat en la que más municipios en riesgo de despoblación hay, no es de extrañar que también sea la provincia que más institutos-escuela tiene. Tal y como señalan fuentes de la conselleria, al concentrar todas las etapas de la enseñanza obligatoria en un mismo centro se evitan los largos desplazamientos diarios y se mejora el servicio educativo obligatorio. "Esto puede ayudar al hecho de que algunas familias de estas poblaciones que estaban pensando en dejar el pueblo se queden, e incluso algunas familias que no viven en estos pueblos se plantean ahora establecer su residencia si saben que en el entorno pueden escolarizar a sus hijos desde Infantil 2 años hasta la ESO", explican.
Por último, la tercera línea que rige este modelo tiene que ver con el reequilibrio y la redistribución de la oferta educativa, con el fin de evitar desplazamientos al alumnado. Y es que, según señalan desde Educación "hay determinadas zonas, sobre todo en entornos rurales, que aunque no padecen despoblación tienen institutos de Secundaria bastante lejos". Esto incentiva la propuesta de mantener la ESO en determinados centros de Primaria, para que la población escolar menor de edad esté distribuida de forma equilibrada en todo el territorio valenciano y, además, reducir los tiempos de rutas de transporte.
Combinando el criterio de lucha contra la despoblación y de reequilibrio y redistribución de la oferta educativa, el área que dirige Tamarit constituyó en el curso 2020-21 el CEIP Francesc Carròs de la Font d'en Carròs como instituto-escuela, también en el curso 2021-22 el CEIP José Alba de la Vilavella y en el curso actual el CEIP Virgen Pobre en Xaló. En el caso de la Vilavella, para transformar su colegio en instituto-escuela, Educación invirtió 1,3 millones en obras de mejora y ampliación. Por su parte, en el de la Font d'en Carròs, invirtió 5,6 millones con el objetivo de construir un centro totalmente nuevo y más grande. Asimismo, durante este mes de febrero, la conselleria tiene previsto acabar las obras de construcción del nuevo instituto-escuela de Xaló, que es el primero en las comarcas de Alicante.