El Fadrell y la empresa se pasan la pelota ante la paralización del jardín que sustituirá la cruz

CASTELLÓ.  El Acord de Fadrell y la empresa adjudicataria, Vainsa Infraestructuras, se pasan la pelota ante la paralización de las obras para restituir el jardín de 1926 que sustituirá la cruz en el parque Ribalta. El portavoz del gobierno municipal, José Luis López, resta importancia a que la actividad esté suspendida desde el pasado 4 de enero, cuando se retiró y trasladó el monumento a su nuevo emplazamiento, y se ciñe al plazo de ejecución.

En base a las seis semanas que recoge el contrato como periodo para culminar el proyecto, López advierte que "cómo se organicen ellos [la mercantil], no lo sé". "Sabíamos que iba a haber un parón y ahora continuarán con los trabajos. No hay ningún problema", subraya. Sin embargo, el también concejal de Urbanismo evita hablar de fechas respecto a cuándo se reanudará la actuación pese a que el reloj sigue corriendo.

"Estamos ante una obra viva, que está en marcha. La forma que la desarrolle la empresa, es cosa de ellos", insiste. Fuentes de la mercantil señalan a este diario que corresponde "a la administración" ofrecer detalles a propósito del calendario, así como las explicaciones en relación a la ejecución.

10 días consumidos

Según el cronograma que figura en el proyecto, la concesionaria debería proceder durante las dos primeras semanas a eliminar y derribar la plataforma de la cruz, los muros, escaleras y bordillos. La única intervención que se ha realizado en estos 10 días (si se incluye este viernes) ha sido cortar la base del lábaro para facilitar la colocación en la ubicación de la parroquia Santo Tomás de Villanueva, donde permanece tal cual se instaló.

Incidente ante la inactividad en la zona vallada

La inactividad en el parque Ribalta. sin presencia de obreros, provoca episodios como el ocurrido este jueves, cuando tres individuos accedieron al interior del recinto vallado para colocar una cruceta de madera. Ante el aviso de varios testigos y vecinos, la Policía Local de Castelló se desplazó hasta el lugar de los hechos, identificando a los hombres. Uno de ellos se trata de Javier Torres, presidente de la Plataforma en defensa de la Cruz del Ribalta y que ya intentó parar la obra encadenándose al monumento.