Hay un nuevo lugar para pensar la fotografía en Castelló

CASTELLÓ. No es fácil toparse con Foto Suelta por Castelló. No está la escuela de fotografía ubicada a pie de calle. Es en una casa de la Avenida Capuchinos, número 39, donde ahora habita el proyecto de Lidón Forés. La castellonense, que lleva trece años dirigiendo diferentes centros artísticos, ha decidido abrir su propia escuela de fotografía arropada, eso sí, por algunos de los referentes que la han acompañado durante este tiempo. Julián Barón, Tere Arcos, Andrés Gallego, Mª Ángel Hervás, Irene Gras y Pollobarba, son los profesionales que le están ayudando a sacar adelante un centro donde no solamente enseñar a disparar una cámara, sino también a entender y querer la fotografía. 

"De qué sirve usar una cámara si no se sabe qué hacer con ella", señala Forés. Es probablemente esta manera de entender la imagen, lo que le llevó a ejercer tan pronto como maestra. Con tan solo 22 años ya empezó a dar sus primeras clases en BlankPaper, una prestigiosa escuela que nació allá por 2006 en el barrio Lavapiés de Madrid y que tiempo más tarde abrío su sede en Castelló. 

Tras ello, Lidón pasó a dirigir una escuela instalada en la que era la tienda más longeva de fotografía en la ciudad. La castellonense se hizo cargo de la parte educativa de Foto Cine Lledó, que en 2020 paso a depender de la franquicia Fotoprix. Su dueño, Toni Adell, se jubilaba y el negocio se despidió de la ciudad a pocos días de cumplir 45 años. 

En ese momento, Forés continúo dirigiendo la escuela, ubicada en la misma tienda, aunque pronto entendió que quizás era el momento de impulsar su propio proyecto. "Desde Fotoprix me acogieron super bien, pero llevaba 13 años gestionando la escuela de diferentes empresas. Sentí la necesidad de hacerlo de manera individual para llevar yo todo el control". Y de ahí nace Foto Suelta. 

Hace un mes que el centro artístico empezó a funcionar de manera oficial, aunque lleva tiempo ofreciendo sus cursos, algunos de ellos de manera virtual. "Da miedo lanzarse a trabajar como autónoma y esperar a ver qué ocurre. Sobre todo porque después de la pandemia las inscripciones se redujeron. Es mucha la incertidumbre, no se qué va a pasar. Pero también es cierto que los cursos online nos permiten que gente de fuera de Castellón, en algunos casos hasta de Latinoamérica, se inscriba a las clases". 

Como sea, uno de los fundamentos de Foto Suelta es que siempre hay que pensar la imagen. "Una foto suelta es aquella que no se ajusta a un orden concreto, a unas reglas establecidas, porque carece de un marco. Es, dicho de otro modo, una foto libre, con entidad propia. Y así es el centro, un espacio dedicado a la formación y a los reportajes fotográficos, pero también un lugar en el que poder encontrar esa imagen que hable por sí sola, desarrollando y potenciando el lenguaje fotográfico de cada uno", explica su fundadora. Desde estos parámetros, la misión del centro es ayudar a contar historias con las fotos, pero también explicar estrategias narrativas, hablar de Historia del arte e incluso Historia del Cine y analizar a fondo diferentes fotolibros. 

Esta motivación ha llevado a Lidón Forés a abrir, además, una página web donde mostrar los trabajos de sus alumnos, además de ofertar cursos. Para la castellonense es importante que todas esas historias que nacen en la escuela no mueran al acabar dentro de un ordenador o un cajón. "Durante estos diez años me he dado cuenta de que la gente ha aprendido con el tiempo a leer las imágenes de manera distinta. No tiene nada que ver en cómo se interpretaban antes. Por eso, es interesante enseñar los trabajos de nuestros alumnos. Muchos son increíbles pero en cuanto acaban el curso, se quedan ahí. La idea es compartirlos, para romper además con ese prejuicio de lo local". 

Cree la fotógrafa que todavía se mira con diferentes ojos al talento local, en comparación con el talento nacional. Sin embargo, no son pocos los creadores que en los últimos años han demostrado su talento. Así mismo, también la ciudad pasa por un buen momento cultural. "Estoy super feliz porque el Photobook Club lo lleva un ex alumno, Vicente Tena. La primera vez que vio un fotolibro se lo enseñé yo", cuenta Forés, quien resalta también la reciente aparición del colectivo Cúmul, "el cual está muy ligado a la fotografía", o la llegada de Carles Saurí a la dirección del EACC. "Parece que el espacio va a tomar un rumbo muy interesante", concluye la creadora.

La fotografía, como el teatro y la música, anda suelta por Castelló y parece que va a crear una importante escena.