CASTELLÓ. Recientemente se ha cerrado la compra del complejo vacacional Marina d'Or por el Grupo Fuertes y Magic Costa Blanca. Los grupos murciano y alicantino formalizaron la adquisición de la 'ciudad de vacaciones' hace menos de un mes y, tras tomar el control efectivo del espacio, buscan situarlo de nuevo en la vanguardia del sector turístico. Un reto que no se antoja del todo sencillo habida cuenta de los resultados que ha cosechado el complejo en los últimos años. El último sobre el que se tienen datos, 2022, presentó unas pérdidas de 27,2 millones de euros.
Así lo reflejan las últimas cuentas anuales de la compañía de Marina d'Or, adelantadas por El Economista, según las cuales el recinto repitió malos resultados tras años en números rojos. De este modo, aunque -señala la firma en su memoria- ha continuado con la recuperación de los niveles de ocupación y actividad previos a la crisis del coronavirus y pese a mejorar la facturación en los últimos tiempos (en 2022, 24,9 millones frente a los 16 del año post-covid), lo cierto es que la firma cerró el ejercicio todavía con abultadas pérdidas, que achaca al "nuevo entorno económico" marcado por la subida de los costes energéticos, de los tipos de interés y la inflación.
Todos estos factores, indica, "no están permitiendo que la velocidad de recuperación sea la deseada" y "ha tenido influencia relevante en la rentabilidad del negocio" con unas pérdidas de explotación de 16,2 millones de euros, que junto a los costes financieros hicieron que el resultado fuera peor. Aunque una de las causas principales en el agravamiento de las pérdidas fue el coste del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) realizado a finales de 2022 tras acabar el ERTE aprobado meses atrás. El despido colectivo afectó a 106 trabajadores y supuso casi 1,2 millones de euros en indemnizaciones.
Así pues, los números rojos del último ejercicio registrado se suman a los de años anteriores. El impacto de la crisis de coronavirus ha hecho que, desde 2020, la compañía haya perdido más de 83 millones de euros en total, con el respectivo empeoramiento de la situación financiera de la compañía. Por ello, el dueño del complejo desde hace cuatro años y hasta hace poco, el fondo de inversión Fallaron Capital tuvo que sanear el complejo, que a finales de 2021 presentaba unas deudas de casi 180 millones de euros.
Así, el fondo "para hacer frente a esta situación" llevo diferentes ampliaciones de capital a finales de 2022 y principios de este 2023 por valor de 113,8 millones de euros. Así, Fallaron capitalizó el pasivo de la 'ciudad de vacaciones' que había adquirido en 2020, además de saldar una deuda de otros 2,4 millones con la Sareb y de realizar la conversión de parte de la deuda por activos inmobiliarios. De este modo, llegado el momento de la compraventa al Grupo Fuertes y Magic Costa Blanca, anunciada a finales del verano, las cuentas estaban saneadas: tras las mencionadas operaciones, la deuda se redujo hasta los 37,2 millones.
Con la adquisición de Marina d'Or, los grupos inversores tienen el reto de hacer rentable unos activos que incluyen cinco hoteles vacacionales con más de 1.200 habitaciones, más de 150 apartamentos en propiedad y alquiler, activos vinculados al ocio como cinco parques temáticos, más de un centenar de locales comerciales, restaurantes, tiendas de ropa, discotecas, retail, centro comercial, heladerías, etcétera; e incluso otro tipo de activos como suelos en distintos estados de desarrollo, plantas de generación de energía, una gasolinera, instalaciones deportivas y almacenes, entre otros.
El objetivo de los nuevos propietarios es "relanzar este proyecto bajo un nuevo concepto turístico y situarlo entre los mejores complejos vacacionales de Europa". En ese sentido, ambas firmas tienen ya con experiencia colaborando juntas, pues trabajaron en consonancia para impulsar Magic Natura, un resort ubicado en el complejo de Terra Natura de Benidorm, otra de las inversiones del Grupo Fuertes en la Comunidad Valenciana.
La idea con la que trabajan los grupos compradores es la de reabrir el complejo de cara al próximo verano, como publicó Castellón Plaza, así como llevar a cabo obras en las instalaciones para darle un lavado de cara y readecuarlas para la nueva etapa. Hasta la próxima temporada alta, la nueva dirección podrá empezar con sus planes de remodelación y las obras. Y será tras el verano de 2024 cuando se puedan retomar las intervenciones de mejora del complejo durante la siguiente temporada baja.
