Uno de los proyectos de Amor en Acció es ayudar, a través de la costura, a mujeres en África que han sido violadas y son repudiadas por la sociedad. La empresa de Borriol Inmatex S.L ha donado 50.000 metros de tela a la ONG para ayudar a estas mujeres a tener un medio de vida
CASTELLÓ. Amor en acció nació en 2013 desde Borriana fruto de la solidaridad de seis personas para ayudar a los más desfavorecidos en Burkina Faso. Hoy, siete años después son más de 300 voluntarios y están presentes además en Paraguay, Costa de Marfil y República Democrática del Congo haciendo frente a las necesidades de la población de África y Sudamérica. Unas necesidades que ahora se suman además a la pandemia global de la covid-19.
Actualmente desde Amor en Acció están llevando a cabo un proyecto de apoyo a las mujeres víctimas de violaciones en el Congo que se quedan embarazadas y son repudiadas por sus familias. “Gracias al padre Gode León de Xert, a través de su fundación ayudamos a estas mujeres, en muchos casos niñas, enseñándolas a coser para intentar darles un medio de vida con el que salir adelante”, cuenta Carolina García, presidenta de la ONG.
Desde Amor en acció han lanzado una campaña de recogida de telas y máquinas de coser para enviarlas al Congo, una iniciativa que despertó el interés de la empresa textil de Borriol Inmatex S.L. “Hemos querido aportar nuestro grano de arena, donando a Amor en Acció 50.000 metros de tejido, para ayudar a que estas mujeres puedan tener una salida”, explican desde la empresa, que decidió colaborar teniendo en cuenta la grave situación que se está viviendo en África y que se está viendo agudizada por el covid. "Muchos de nosotros tenemos máquinas de coser en nuestras casas que no utilizamos nunca y para estas mujeres pueden suponer de gran ayuda" explican desde la ONG.
Carolina García es además de voluntaria de la ONG, sanitaria en un hospital en España y asegura que si la situación en nuestro país ha sido muy grave, en territorios como África o Sudamérica está siendo muy complicado. “Es bastante complicado, empezando porque la sanidad es prácticamente nula para la población más pobre, más vulnerable. Y la mortalidad está siendo muy alta”.
“En Burkina Faso están viviendo una situación de escasez de alimentos muy grave, ya que se trata de un país que importa la mayoría de productos y debido al cierre de fronteras están teniendo muchas necesidades”, cuenta Carolina García. “Desde aquí les mandamos dinero para que puedan adquirir pasta y arroz que es básicamente lo único que tienen, lo pasan mal por la enfermedad y por la falta de alimento”.
"Nuestra representante en Paraguay trabaja en un centro de salud y nos cuenta que no tiene nada que darle a los enfermos y que por el desabastecimiento de medicamentos cierran los consultorios", narra Carolina.
Además, desde la ONG comentan que por la situación que está viviendo España debido a la pandemia, disminuye la ayuda de la población a iniciativas humanitarias en otros países. “Al ver que hay mucha necesidad aquí, parece que los otros continentes pasan a un segundo plano”, apunta la presidenta de Amor en Acció, aunque asegura que, “la gente que ha colaborado siempre lo sigue haciendo”.
EN ÁFRICA PREGUNTAS, ¿QUÉ HAS COMIDO HOY? Y TE DICEN: SAGABO, Y AYER? Y CONTESTAN… NO SÉ SI AYER COMÍ.
Pero a pesar de que la crisis del coronavirus está siendo global, desde Amor en Acció quieren concienciar sobre la necesidad de ayudar a territorios vulnerables como África. "Al final en España si estás necesitado es muy difícil no poder comer nada, porque existe red de ayuda extensa, o si te pones enfermo sabes que puedes acudir a un hospital y te atenderán. Pero en África preguntabas, ¿qué has comido hoy? Y te decían sagabo, y ayer? y te dicen… no sé si ayer comí.