CASTELLÓ. Pocas obras civiles en Castelló han generado tanto interés en esta legislatura como el nuevo CEIP Mestre Canós. Hasta 9 concurrentes se disputan el contrato para construir el colegio, cuyo presupuesto asciende a 5 millones de euros, con un plazo de ejecución de 15 meses. Cuatro Unión Temporal de Empresas (UTE) y cinco mercantiles han formalizado ofertas. Aunque hay una mayoría de compañías locales, llama la atención la participación en la licitación de firmas catalanas, gallegas, madrileñas y valencianas.
A las castellonenses Becsa, Industrial de Energía y Tecnología (Indertec), Civicons, Crisol Obras y Servicios (Cos), Gimecons, Omega y Sistemas y Montajes Climatización (Symelec), se suman la barcelonesa Construcciones, Pintura y Mantenimiento (CPM), la orensana Extracto, Construccions e Proxectos, la madrileña Obrascon Huarte Lain (OHL Grupo) y las valencianas Globalklee, Guerola Transfer y Ocide. Todas tienen amplia experiencia en la construcción y trabajan habitualmente con entidades públicas.
Las UTE que participan están formadas por Becsa e Indertec, Simetría Grupo; Globalklee y CPM; Guerola y Extraco; y Omega y Symelec. Las demás empresas pujan en solitario, de acuerdo con la documentación aportada en el expediente que aparece en la plataforma de Contratación.
Las 9 postulantes plantean mejoras respecto a las condiciones que figuran en el pliego de cláusulas administrativas. El incremento de las calidades y materiales se cuantifican desde los 16.677,87 euros, como cantidad más baja, hasta los 343.150,66 euros, como la más elevada. Algunas de esas mejoras son: tabiques móviles, instalación de pizarras digitales, uso de gres porcelánico, colocación de una pérgola bioclimática, sistema detección de gas en la cocina, aumento de la producción fotovoltaica y vidrios de baja emisividad.
Una vez admitida la documentación de cada licitador y abiertos los sobres con los criterios técnicos, ahora la Mesa de Contratación debe realizar una primera baremación antes de analizar las ofertas con los aspectos económicos. La suma de las dos plicas determinará la concurrente ganadora.
El pasado mes de octubre, la Junta de Gobierno Local aprobó el proyecto básico y de ejecución para la demolición y posterior construcción del centro educativo. Lo hizo tras incrementar en 1,4 millones de euros el presupuesto inicial como consecuencia del encarecimiento de las materias primas. La actuación, que se enmarca dentro del Pla Edificant de la Conselleria de Educación, prevé iniciarse este verano.
El Mestre Canós, que se construyó en 1956, sufrirá una completa remodelación. La nueva edificación podrá acoger entre 250 y 300 alumnos desde 2 años. El colegio contará con una unidad de educación Infantil de primer ciclo y tres de segundo, seis de Primaria y una cocina completamente renovada, con un comedor para 200 comensales por turno. Asimismo, habrá zonas de juegos y áreas deportivas en el exterior, además de un gimnasio. Por otro lado, promoverá el autoconsumo energético con la instalación de placas fotovoltaicas.
La solución adoptada por los técnico municipales sobre la actual parcela, de 2.872,37 metros cuadrados, implicará un inmueble en forma de L, con dos alturas. Una parte estará adosada a la calle Tenerías, y otra, al oeste, a la avenida de Mar. La distribución del nuevo colegio establece que el programa de Infantil, el comedor, la sala de usos múltiples y la zona de administración se localizarán en la planta baja, mientras que las clases de Primaria, la biblioteca, la sala de informática y los despachos se situarán en el primer nivel.