CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Burriana ha conseguido mejorar la eficiencia energética del Mercado municipal mediante la rehabilitación de la cubierta del edificio y con la reforma de las instalaciones de climatización e iluminación para la mejora de la calificación energética que se ha completado recientemente.
Una iniciativa enmarcada en la estrategia Edusi, cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) en el marco del Programa Operativo de Crecimiento Sostenible 2014-2020.
La concejala de Comercio y Mercados, Sara Molina, y el edil de Sostenibilidad Medioambiental, Bruno Arnandis, han manifestado que estas actuaciones “comportan un importante ahorro energético y económico, una mayor durabilidad de los equipos y, al mismo tiempo, un aumento en la sensación de confort de los trabajadores y usuarios de las instalaciones del mercado”.
La reforma de las instalaciones de climatización e iluminación realizadas por un importe de 167.249,83 euros han consistido en la sustitución de los equipos existentes por otros de similares características, pero con una mayor eficiencia energética, ya que los equipos anteriores “presentaban un bajo rendimiento energético, además de disponer de un gas refrigerante, R-22, dañino para la capa de ozono y que en unos años ya no podrá utilizarse, mermando todavía más el rendimiento energético del equipo”, han explicado ambos concejales.
Además, se ha incorporado un recuperador de calor al objeto de cumplir con las exigencias de la normativa vigente en cuanto a la ventilación del local. Referente a la instalación de iluminación, se ha apostado por materiales más eficaces en todo el inmueble y el cambio necesario en el cableado y cuadro de la instalación eléctrica, y se han sustituido las luminarias por nuevas de tecnología LED, con lo que se ha conseguido una mejora de la eficiencia energética del edificio.
Igualmente, en la medida de lo posible, se han mantenido los conductos de distribución de aire por el interior del mercado, y se ha dotado de dispositivos que permiten contabilizar el consumo de forma separada al resto de instalaciones.
Respecto a la Clase Energética de eficiencia resultante del estudio de calificación tras la aplicación de las mejoras energéticas propuestas centradas en climatización e iluminación, se ha conseguido pasar de la ‘C’ a la ‘B’.
La rehabilitación de la cubierta del Mercado municipal realizada en 2018 y ejecutada por un importe de más de 150.000 euros fue el inicio del proyecto global para la mejora de la eficiencia energética del edificio. Su objetivo principal fue, por un lado, solucionar el problema de goteras que padecía y la pérdida de calor y, por otro lado, eliminar el potencial peligro ambiental por deterioro del fibrocemento de la cubierta.
La intervención, han explicado Molina y Arnandis, supuso “mejorar notablemente las condiciones de eficiencia energética de las instalaciones y la climatización, en la medida que se optimizó el envolvente de cubierta, y también mejorar su aspecto exterior”, que se suma a la reciente actuación y “completa la renovación energética del enclave comercial con un elevado potencial de ahorro energético”.
Como término medio, han precisado, “se pueden conseguir ahorros de entre el 20% y 30% en el consumo energético y económico, según la tipología de los equipos instalados”.
