CASTELLÓ. Castelló planea abrir el Centro de Envejecimiento Activo y Saludable (CEA) a partir de enero de 2023. Tras dos años de obras y equipamientos, con una inversión superior a los 6,1 millones de euros, el Ayuntamiento saca ahora la licitación de la gestión integral por un importe máximo de 2,6 millones de euros (se incluye en la cantidad anterior) y una duración de hasta cinco años. Se trata del último paso para garantizar la puesta en marcha de uno de los grandes proyectos del Acord de Fadrell en esta legislatura.
La prestación consiste en organizar y administrar el funcionamiento diario del CEA, esto es, asumir la dirección y ofrecer una serie de servicios. Los más destacados corresponden a la fisioterapia, la intervención y trabajo social, la orientación y atención psicológica y la realización de acciones dirigidas a los usuarios en modalidad presencial y en streaming.
Respecto a las actividades, se establecen dos tipos. Aquellas de carácter continuado, que coinciden con el curso lectivo (6,5 mensualidades). Se desarrollan de lunes a viernes en dos periodos: del 15 de octubre al 15 de diciembre y del 15 de enero al 31 de mayo del siguiente año, en horario ordinario de 9.00 a 20.00 horas. Una segunda clasificación obedece a las actividades puntuales, que se efectúan de manera esporádica y su ejecución no debe prolongarse de manera continuada en el tiempo.
Entrando más al detalle sobre los objetivos de la gestión integral, las necesidades a satisfacer van desde el diseño de un espacio que mejore las capacidades físicas y psíquicas de los usuarios, pasando por el fomento de la intervención psicosocial en envejecimiento activo y saludable, hasta la materialización de un edificio con recursos que permitan avanzar en la capacitación y la autonomía individual. Otras finalidades se refieren al establecimiento de un punto de referencia para la investigación de la realidad de las personas mayores en Castelló y a la implantación de un enfoque comunitario de intervención gerontológica.
La rehabilitación de la antigua Casa de Cultura, ubicada entre las calles Antonio Maura, Enmedio e Isabel Ferrer (una parcela de 725,74 m2 en forma de T), convierte el edificio en un inmueble único, 100% accesible y vertebrado por una serie de patios interiores que aportan luz y ventilación natural en todas las estancias. Huertos urbanos en la azotea, cafetería, salón de actos para 100 personas, sala de exposiciones, gimnasio, zona de estimulación sensorial, espacios de lectura o una sala de ensayos insonorizada son algunas de las principales características.
La construcción del CEA comenzó en enero de 2021 tras aprobarse el concurso público en septiembre de 2020. La actuación se prolongó por un periodo de 18 meses. Becsa se hizo con el contrato frente a otras dos postulantes al presentar la oferta "con mejor relación calidad precio", según el acuerdo de la Mesa de Contratación.
Tras año y medio de ejecución, el Ayuntamiento comenzó a equipar el Centro de Envejecimiento Activo a mediados de 2022. Además del mobiliario, adquirió equipos informáticos, como ordenadores (de mesa como portátiles), tabletas y lectores de e-book. También compró un aparato de videoconferencia y un vídeo wall que, a través de las diferentes pantallas táctiles, posibilita a los usuarios interactuar, obtener información o sumergirse en experiencias de realidad virtual.
Ahora, una vez finalizada las obras y completado el suministro del interior, solo falta adjudicar la gestión integral del edificio para abrir sus puertas. Según el contrato, la explotación empieza a partir del 1 de enero de 2023 y finaliza el 31 de diciembre de 2025. Sin embargo, la concesionaria cuenta con la posibilidad de acogerse a una prórroga de dos años para garantizar su continuidad hasta finales de 2027. De ahí que el valor estimado del expediente ascienda a esos 2,6 millones de euros (IVA incluido).