'Expediente X' con la residencia de mayores de Castelló: Carrasco pide al Consell desbloquearla

CASTELLÓ. La construcción de la nueva residencia de mayores de Castelló, en la calle Onda, se ha convertido en un Expediente X. A pesar de que la adjudicataria, la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por la castellonense Gimecons y Llop, firmó el contrato a finales de 2022, la fecha de inicio de la ejecución continúa siendo un enigma. Ante esta situación, la alcaldesa, Begoña Carrasco, mueve ficha para tratar de activar la obra civil en las próximas semanas.

La primera munícipe se reunirá con la vicepresidenta segunda y titular de las carteras de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda, Susana Camarero, al objeto de buscar una solución. Ese encuentro, además, se producirá en la capital de la Plana, de manera que la consellera tendrá la oportunidad de visitar la parcela y otros terrenos en los que están en marcha actuaciones relacionadas con su departamento. Por ejemplo, el edificio de Borrull.

"No sé lo que faltaba pero nos hemos encontrado el mismo huerto urbano que había hace ocho años por el anterior gobierno. Vamos a luchar y reivindicar que eso sea una residencia pública, que falta nos hace en esta ciudad", asegura Carrasco. "Estaba todo listo y no entendemos cómo todavía no han empezado las obras", agrega.

Sin explicaciones desde la Conselleria

En este punto, la alcaldesa reconoce su perplejidad a propósito del retraso, cuando "se supone que se licitó y adjudicó el proyecto". "Desde la Conselleria todavía no se nos ha dado una explicación. Tenemos pendiente una visita de la vicepresidenta del Consell. Iremos a varios sitios. Uno de ellos será el huerto de la calle Onda para desbloquear la actuación", anticipa.

Por cuestiones de agenda, esa cita aún no se ha programado, si bien es cierto que ambas administraciones están en permanente contacto por los intereses mutuos, según aseguran a este diario fuentes consultadas. En cualquier caso, la reunión se llevará a cabo entre octubre y noviembre ante la necesidad de garantizar cuanto antes los trabajos del geriátrico público.

La firma del contrato y lo que dice el pliego sobre los plazos

El pasado 29 de diciembre, la adjudicataria suscribió con la Conselleria el contrato. De acuerdo con lo que recoge el acta de formalización, la concesionaria disponía desde ese momento de un plazo de tres meses y medio para redactar los distintos documentos asociados al expediente, desde el proyecto de ejecución, pasando por el de instalaciones y de actividad, hasta el estudio de seguridad y salud.

Una vez aprobados esos planes, tenía que discurrir un intervalo de 15 días con vistas a suscribir el acta de replanteo, trámite jurídico que establece el inicio de los 20 meses para construir el edificio. Si se cumplían las previsiones, los trabajos debían arrancar en plena precampaña de las elecciones municipales y autonómicas para finalizar durante 2024.

Sin embargo, ninguno de esos pronósticos se ha cumplido. Hace un mes, el portavoz del gobierno municipal, Vicent Sales, desvelaba que la ocupación del solar para la nueva residencia no se había producido en verano por culpa de un "papel". Según explicaba, la Conselleria de Hacienda, entidad adjudicadora, no había recibido la petición sobre el traslado del huerto urbano. "Patrimonio no tiene ninguna constancia de esa solicitud. Esa ha sido nuestra sorpresa. La ejecución está pendiente desde hace siete años. Lo que vamos a hacer es agilizar un proyecto que el Botànic y el Fadrell han dejado empantanado", señalaba.

El proyecto, con un presupuesto de 14,2 millones de euros, implica la construcción de un inmueble sobre una parcela de 3.760 metros cuadrados, que presentará dos departamentos diferenciados. Uno contendrá exclusivamente el geriátrico con aforo para 80 usuarios, mientras que el otro tendrá un uso de centro de día para 40 personas, con acceso desde la calle Ribelles Comín. La edificación, con una superficie construida de 7.470,50 m², contendrá cinco plantas y sótano.