Una tienda de València rescata del olvido el 'stock' de Discos Medicinales

CASTELLÓ. Hay noticias que pillan especialmente por sorpresa y la que dio este miércoles Discos Oldies seguro lo hizo. La tienda valenciana ha decidido adquirir todo el stock que Discos Medicinales dejó tras su cierre. Miles de vinilos y un volumen incalculable de compact discs que, tras permanecer en un almacén desde 2019, ahora habitarán en el carrer de la Mare de Déu de Gràcia, en València. 

Fue en el verano de 2019 cuando la mítica tienda castellonense cerró para siempre, poniendo fin a un negocio que llevaba en pie desde 1983. Discos Medicinales ha sido siempre un referente, pero además, en sus últimos años de vida se convirtió en el único santuario dedicado exclusivamente a la venta de música en la ciudad. Pese a ello, la suya era, según reconoció más de una vez su socio y fundador José Luis Roig, una muerta anunciada. 

La piratería, la llegada de la música a las grandes superficies o incluso hipermercados, así como la irrupción de plataformas digitales, tales como YouTube o Spotify, dificultaron que muchos pequeños negocios se mantuvieran en pie. "A partir de los 2000 se rompió el afán por comprar música. La gente ya no quería pagar por ella, preferían descargarse una canción sin necesidad de profundizar más en el artista. Por esto, en cinco o seis años desaparecieron más de mil locales", señaló Roig en una entrevista con Castellón Plaza, quien además apuntó a la "falta de ayudas" y al elevado IVA cultural como los mayores problemas. 

Todo esto habría provocado que Castelló se convirtiera con el paso del tiempo en una ciudad prácticamente huérfana de locales especializados en música. También Discos Ritmo empezó a liquidar su 'stock' a finales de 2021, con el objetivo de reducir su catálogo al máximo y dar paso a la venta de otro tipo de productos. Hoy, aunque todavía se puedan ver en su interior algunos álbumes, son muy pocas las novedades que les llegan y los viejos discos que quedan.

Discos Oldies, una superviviente en el sector

No obstante, el siempre inestable sector musical es a veces capaz de dar buenas noticias. La hemeroteca de Discos Medicinales no va a un sitio cualquiera, viaja a una de las tiendas musicales más longevas del país. Discos Oldies lleva en pie desde 1978 y lo hace, además, gracias al relevo generacional. 

Fue a finales del año pasado cuando el local cambió de dueños, ante la inminente jubilación de sus antiguos propietarios. A partir de entonces, la histórica tienda valenciana comenzó una nueva etapa de la mano de Andreu y Pere, ambos de la Vall d'Uixó, y Chema y Mario, de València. Un compromiso por mantener viva la historia de este longevo comercio que ahora seguirán, en cierto modo, con el local castellonense. 

Una hemeroteca con años de historia

Aunque muchos se apenarán porque el 'stock' de Discos Medicinales no reside ya más en la capital de la Plana, lo más importante es que este no se pierda, como recalcan desde Discos Oldies. "Es un producto que lleva mal el paso del tiempo si no está cuidado. Hubiera sido una pena muy grande que continuará almacenado. Ahora volverá a quedar en manos de los compradores", manifiestan los valencianos, quienes se enteraron por una serie de casualidades de que la tienda castellonense ponía en venta su 'stock' tras años guardado en un almacén.

"Todavía estamos recogiendo las cajas y hemos abierto muy pocas. Por eso es complicado hablar de una cifra exacta. Cuando los dueños de Discos Medicinales empezaron a trasladar los discos de la tienda a un almacén, apuntaron las referencias en un excel, pero hay muchas más que no están. La tienda cerró de la noche a la mañana y hay incluso mucho disco por abrir que quedó como perdido", cuentan desde el local de València, al que le espera por delante un duro trabajo.

Sea como sea, los nuevos dueños de Discos Oldies están contentos por su decisión y aseguran que este es "un sector con mucho presente y futuro", en el que hace falta sobre todo "ganas". "Comprar una tienda de discos entera no es fácil, pero creíamos que ahora mismo podemos permitirnoslo".