Vainsa acredita la solvencia para retirar la cruz: no se descarta el inicio de las obras para esta semana

CASTELLÓ. Vainsa Infraestructuras acredita la solvencia técnica y administrativa para retirar la cruz de Ribalta. Lo hace dentro de los plazos establecidos en el pliego de prescripciones técnicas y administrativas. Ahora, la empresa valenciana está a la espera de la aprobación de la adjudicación por parte del Ayuntamiento de Castelló, vía decreto de Alcaldía, para sellar el contrato y posteriormente rubricar el acta de comprobación de replanteo.

Ambos trámites, los últimos del proceso administrativo, pueden incluso finiquitarse esta misma semana, siempre en el mejor de los casos, según fuentes vinculadas con el expediente. Esto significa que no se descarta el comienzo de la ejecución el viernes, como tarde. De hecho, la firma de la citada acta de replanteo marca en realidad el inicio del periodo de seis semanas para acometer la actuación. Se trata de un acto jurídico que permite a la empresa disponer de los terrenos. 

Sacar el monumento antes de Navidad

De acuerdo con la previsión que maneja el Acord de Fadrell, el traslado del monumento debe producirse antes de Navidad. Un objetivo asumible si solo se trata de eso, esto es, de eliminar el lábaro de su actual emplazamiento para llevarlo al nuevo, en la explanada de la parroquia Santo Tomás de Villanueva.

Otra cosa bien distinta obedece al cumplimiento total del contrato, que incluye la restitución del jardín de 1926. En vista de que queda mes y medio para la celebración de las Pascuas, parece imposible que el proyecto esté concluido en vísperas del 24 de diciembre. Además, la primera semana completa del próximo mes resulta prácticamente inhábil por la existencia de dos festivos, el martes 6 y el jueves 8, lo que complica todavía más la posibilidad de rematar la obra.

Los trabajos organizados en cuatro fases

Los trabajos se organizan en cuatro fases. La primera se centra en la cruz, con las operaciones de encofrado, alzado y transporte. La segunda se refiere a los movimientos de tierra para eliminar la plataforma y crear los nuevos andenes y macizos. La tercera atañe a la albañilería y la cuarta culmina la distribución del espacio verde.

La jardinería contempla la colocación del seto (Pittosporum tobira) que define la nueva área, así como la plantación de especies vegetales, utilizando el listado de variedades utilizadas tradicionalmente en Ribalta. En la zona interior se prevén arbustivas tales como Prunus laurocerasus, Taxus bacatta o Senecio petasitis. En el punto con más luz, se proyectan árboles de los que han desaparecido del parque y que hay constancia de su presencia hace años, como puedan ser cedros (Cedrus deodara), cedro japonés (Cryptomeria japonica) o pino canario (Pinus  canariensis).

El coste total del proyecto asciende a 58.914,05 euros (impuestos excluidos). Vainsa se compromete a realizar la actuación por 58.908,16 euros. Esa mínima diferencia entre el presupuesto de licitación y el de adjudicación (apenas 5,89 euros) confirma que la cuantía está al límite del beneficio industrial, es decir, de que sea rentable.