MADRID (ENVIADO ESPECIAL). Derrota sin paliativos (4-1) del Villarreal en el Santiago Bernabéu. Los hombres de Marcelino no pudieron aprovechar el impulso del triunfo en Rennes por culpa de un primer tiempo fatídico, en el que se lesionaron Álex Baena y Gerard Moreno y el Real Madrid encarriló el resultado con tantos de sus dos futbolistas más en forma: Rodrygo y un Bellingham que apuntó un nombre más en su extensa lista de víctimas de esta temporada. Cuatro golpes demasiado duros que terminaron por noquear al Submarino amarillo.
José Luis Morales, que guarda un idilio con el Bernabéu, pareció dar alas a los de la Plana Baixa en el arranque del segundo tiempo, pero Brahim y Modrić se encargaron de devolverles a la lona con dos dianas que sentenciaron el partido. Ya son 33 goles en contra a falta de dos partidos para terminar la primera vuelta, números inauditos para un Villarreal que necesita pasar página este miércoles en el duelo en La Cerámica ante el Celta que clausurará 2023.
El técnico del Submarino, consciente del grave problema defensivo de su equipo, quiso probar la pareja Albiol-Mandi en detrimento de Jorge Cuenca, pero el experimentó no funcionó. De hecho, Cuenca entró tras el descanso para librar de minutos a Albiol. También Ancelotti se guardó una única sorpresa, confiando un partido más en un Andriy Lunin que no hizo ninguna parada y prácticamente fue uno más de los 70.5000 espectadores que llenaron el remozado feudo madridista.
El Real Madrid salió con el modo apisonadora activado: presión muy alta hasta el área de Jörgensen y mucha movilidad en ataque para empezar a marear rápidamente al conjunto de la Plana Baixa. Ilias Akhomach y Gerard Moreno dieron pequeñas dosis de oxígeno al Submarino, que trató de no dejarse amedrentar por un Santiago Bernabéu a con muy buena entrada y súper encendido con Álex Baena por el episodio ocurrido en abril con Fede Valverde.
Al dolor de oídos del de Roquetas de Mar se sumó una entrada de Lucas Vázquez que le dejó cojeando durante un buen puñado de minutos, hasta que tuvo que resignarse y ser sustituido por Ramon Terrats cerca de la media hora de encuentro. Poco antes el cuadro de Ancelotti ya había avisado enviando un balón al larguero vía Luka Modrić.
Casi de inmediato, la magia del croata volvió a aparecer y se alió con el olfato del insaciable Jude Bellingham, que cabeceó lejos del alcance de Jörgensen para anotar su decimotercer gol en Liga y enfervorecer a la grada, que ya entona de memoria el "Hey Jude" casi en cada partido.
El Madrid también sufrió una lesión a raíz de un mal gesto de David Alaba, pero eso no impidió que al 1-0 le sucediera con velocidad el 2-0 del brasileño Rodrygo, el otro hombre enrachado del conjunto merengue. Tras una serie de rebotes en el área, el balón le cayó al ex del Santos y, tras revisión del VAR, el tanto subió al marcador.
Demasiada agua se estaba filtrando entre las líneas defensivas del Submarino, que terminó de romperse cuando su referente y mejor futbolista, Gerard Moreno, se retiró cabizbajo antes del descanso aquejado del enésimo problema físico en los últimos años. Demasiados golpes recibidos en 45 minutos como para tener opciones en la segunda mitad.
Marcelino quiso minimizar daños al descanso y quitó a Raúl Albiol para dar minutos a Cuenca, además de meter a Sørloth en lugar de Gerard Moreno. El partido parecía seguir por los mismos derroteros, pero si en el Madrid marcaron los más en forma, el jugador del momento del Villarreal no iba a ser menos.
Dani Parejo y un Terrats que se reivindicó fabricaron una jugada rápida y muy vertical que José Luis Morales definió con aplomo ante un Lunin que todavía no había podido ni entrar en calor. El Villarreal parecía poder retomarle la cara al partido a pesar de todas las adversidades, pero Brahim se encargó de despertar del sueño a los amarillos rompiendo la cintura de Cuenca antes de definir para el 3-1.
Sin piedad ante una defensa de papel, Modrić se quitó las ganas de marcar aprovechando un error en cadena de Capoue, Parejo y Cuenca. El 4-1 terminó de hundir al conjunto amarillo ante una grada que reclamaba con vehemencia una "manita" y que recitaba "olés" con cada pase de los suyos.
Aunque no llegó el reclamado quinto tanto, el público del Bernabéu se marchó más que satisfecho tras la visita del Villarreal. Los de Marcelino continúan arrastrando un problema fundamental que no le deja avanzar, la fragilidad defensiva, pero además contra el Madrid sólo dispararon una vez a portería.
4- Real Madrid: Lunin; Lucas Vázquez, Rüdiger, Alaba (Nacho, min. 34), Mendy (Fran García, min. 46); Kroos (Tchouaméni, min. 78), Valverde, Modrić, Bellingham (Ceballos, min. 78); Rodrygo y Brahim (Joselu, min. 84).
1- Villarreal: Jörgensen; Altimira, Albiol (Cuenca, min. 46), Mandi, Pedraza; Ilias (Trigueros, min. 74), Parejo, Capoue, Baena (Terrats, min. 29); Gerard (Sørloth, min. 46) y Morales (Ben Brereton, min. 78).
Goles: 1-0, min. 25: Bellingham. 2-0, min. 37: Rodrygo. 2-1, min. 54: Morales. 3-1, min. 64: Brahim. 4-1, min. 67: Modrić.
Árbitro: Jorge Figueroa Vázquez (Comité andaluz). Amonestó a Bellingham y Tchouaméni por el Real Madrid y a Altimira, Ilias y Capoue por el Villarreal.
Incidencias: partido correspondiente a la jornada 17 de La Liga Santander disputado en el Estadio Santiago Bernabéu ante 70.500 espectadores.