Les Corts piden al Consell que paralice la MAT, la Magda y megaproyectos renovables en los juzgados

CASTELLÓN. Si el Gobierno no paraliza los proyectos, la Generalitat debería intentarlo en los juzgados. Esta es la encomienda que han hecho Les Corts al gobierno valenciano: que acuda a la justicia para frenar proyectos energéticos con el visto bueno del Gobierno central pero que cuenten con informes desfavorables de la administración autonómica, como la macroplanta solar Magda. También otras instalaciones como las líneas de muy alta tensión (MAT) proyectadas en Almassora-Morella o la de Forestalia.

La comisión de Medioambiente, Agua y Ordenación del Territorio del parlamento autonómico dio luz verde este jueves a una proposición no de ley propuesta por el PSPV y ampliada a propuesta de Compromís que pide al Consell que reclame al Gobierno "desestimar todos los proyectos de generación y transporte energético de competencia estatal" pero que cuentan con "informes desfavorables" de la Generalitat. Y cita como ejemplos la Magda y las MAT de Forestalia (Teruel-Morella), Morella-La Plana, Ojos Negros-L'Eliana, Almansa-Montesa o Rojalinda-Rosales.

Hay que recordar que los grandes proyectos de energías renovables, con una potencia superior a los 50 megavatios, son tramitados por el Ministerio para la Transición Ecológica que, tras informes no vinculantes de la Generalitat Valenciana, acaba resolviendo con sendas declaraciones de impacto ambiental (DIA), y más adelante con las autorizaciones administrativas correspondientes. Es por ello que algunos proyectos como la Magda y líneas de alta tensión han obtenido la declaración de impacto ambiental favorable por parte del Gobierno pese a contar con informes desfavorables de la Generalitat.

Esta situación ha levantado no poca polvareda, al posicionarse la mayoría del espectro político en contra de llevar a cabo estas grandes iniciativas, y también la propia Generalitat, cuya Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, que dirige la consellera Isaura Navarro, de Compromís, llegó a remitir una carta al Ministerio exigiendo la paralización del proyecto de la Magda por sus "efectos negativos desde el punto de vista medioambiental" que "quedan fuera de toda duda".

Por eso, y ante la posibilidad de que la reclamación frente al Gobierno de España no fructifique, la proposición no de ley (PNL) ampliada por Compromís va más allá y pide a la Generalitat que, si hace falta, tome "las medidas necesarias para recurrir por la vía jurisdiccional las autorizaciones estatales que se hayan podido otorgar o se otorguen a esos proyectos". Una petición que se suma a otras resoluciones del propio parlamento autonómico que pedían "repetidamente la paralización" de estas iniciativas y otras "con afección similar sobre el territorio". La propuesta se aprobó con los votos a favor de los partidos del Botànic -PSPV, Compromís y Unides Podem- junto con el PP. Vox y Ciudadanos votaron en contra.

Además, en la PNL el parlamento autonómico reclama la creación de un grupo de trabajo -que ya se acordó en la Diputación de Castellón en febrero- con el ministerio para buscar "la mejor solución ante la proliferación de parques de generación energética y líneas de evacuación procurando una implantación de las mismas acordadas y ordenadas con el menor perjuicio al territorio posible". y pide al Consell asistencia técnica y económico a los municipios afectados por los proyectos energéticos y sus líneas eléctricas de evacuación para "poder presentar los trámites que se consideren pertinentes en la defensa de esos municipios y sus intereses".

Cambios en las leyes

Por otro lado, la propuesta aprobada insta al Gobierno valenciano a implementar "las modificaciones normativas necesarias" al objeto de incrementar "al máximo" las garantías ambientales, territoriales y paisajísticas a la hora de autorizar proyectos energéticos de "gran afección" dentro de las competencias autonómicas. Así, pide incluir entre los criterios la "no afección a núcleos rurales habitados que puedan estar en las cercanías de las subestaciones". 

Asimismo, y para fomentar el autoconsumo, reclama al Consell los cambios normativos y los recursos para agilizar la tramitación de proyectos renovables "de pequeñas dimensiones, próximos a los lugares de consumo y con bajas afecciones territoriales", y que solicite lo mismo al Gobierno central. 

"Modelo de equidad territorial"

La coalición valencianista manifestó su satisfacción por el acuerdo: "Nuestra enmienda da mucha más fuerza a la propuesta, ya que reclama que se cumplan también los numerosos acuerdos de les Corts en los que, también gracias a Compromís, se acordó paralizar las autopistas eléctricas que pretenden atravesar decenas de municipios de Castelló, así como megaplantas solares como el Magda", explicó la diputada de Compromís Graciela Ferrer.

Por su parte, el número uno de la candidatura de Compromís por la circunscripción de Castelló a les Corts, y portavoz adjunto de Compromís, Vicent Marzà, subrayó uno de los puntos del acuerdo: "Si el Gobierno de Madrid autoriza proyectos que les Corts han rechazado, el Consell deberá ir a los tribunales para tratar de paralizarlos”, explicó. Y añadió que el acuerdo es "un paso más hacia un modelo de equidad territorial que defiende Compromís, un modelo en el que los vecinos y vecinas de los municipios de interior tengan los mismos derechos y servicios que quienes viven en zonas más pobladas. Y eso pasa por romper con un modelo que  convierte el interior en una zona de extracción energética para suministrar a la costa".