CASTELLÓ. La primera ronda de contactos bilaterales que ha mantenido el PSPV con Compromís y Unides Podem-CSeM-EUPV este lunes para negociar un futuro acuerdo de gobierno en la ciudad de Castelló ha concluido con "una sensación de satisfacción mutua". Así lo han transmitido las tres formaciones, que continuarán las conversaciones, a dos y tres bandas, a lo largo de esta semana con el objetivo de reeditar un pacto de gobierno progresista antes del sábado, cuando se constituirá en pleno el Ayuntamiento de Castelló.
Sobre la mesa, cuestiones programáticas. El PSPV quiere que el nuevo acuerdo se construya sobre la base de su proyecto electoral, que fue avalado, recuerda, "por más de 25.000 ciudadanos y ciudadanas" el pasado 26 de mayo. Las propuestas de la confluencia formada por Podem, CSeM y EUPV complementarían el programa, mientras que Compromís ha aportado 78 medidas para su incorporación en el futuro acuerdo. Según fuentes de la mesa de negociación, se creará una comisión específica para abordar los ejes programáticos, dada la complejidad del contenido a tratar.
En sendas reuniones se ha abordado también la estructura municipal. El PSPV ha planteado un nuevo diseño de las áreas de gestión, con la reorganización de concejalías. Cabe recordar que, de reeditarse el Pacte del Grau, el equipo de gobierno contaría con un total de quince ediles -cuatro más que en el pasado mandato-, lo que da pie a una redistribución de competencias para aliviar la carga en determinadas áreas de gestión.
La principal novedad, si se alcanza un acuerdo de gobierno, será la entrada de Unides Podem-CSeM-EUPV en el Ejecutivo local. La confluencia ha puesto sobre la mesa su interés por asumir las concejalías de Vivienda y Medio Ambiente. En este último departamento pretende abordar materias como movilidad sostenible, una competencia integrada hasta ahora en la cartera de Urbanismo, por lo que se estudiará el encaje entre ambos departamentos. En cualquier caso, las propuestas de la confluencia han sido bien recibidas por parte del PSPV, que las considera "asumibles en un eventual acuerdo".
Por su parte, Compromís ha rehusado explicitar en la reunión con los socialistas cuáles son sus pretensiones en torno a la asunción de competencias municipales. Como ya anunció, su prioridad en la negociación es empezar por el "qué", y después abordar "el quién y el cómo". De esta forma, aún no ha hecho públicas sus aspiraciones en el futuro gobierno de la ciudad, pero sí ha señalado la necesidad de acompañar el nuevo diseño organizativo de "una realidad administrativa y un presupuesto".
Las tres patas del acuerdo de gobierno en ciernes han coincidido en señalar la sintonía alcanzada en las dos primeras reuniones celebradas este lunes en la sede socialista. "Las sensaciones son buenas [...], comenzamos a dar pasos para conseguir un nuevo acuerdo de gobierno para la ciudad de Castelló", ha señalado el concejal electo y miembro de la comisión negociadora del PSPV, Rafa Simó.
Por su parte, desde Unides Podem-CSeM-EUPV, Salomé Agudo ha mostrado su confianza en que "esta negociación acabe con un gobierno progresista". "Si las negociaciones siguen así, lo vemos viable y creemos que sería deseable para la ciudad", ha añadido la representante de la confluencia.
En la misma línea se ha pronunciado la concejala electa y miembro de la comisión negociadora de Compromís, Verònica Ruiz: "Trabajaremos duro durante estos días para renovar el Pacte del Grau o el pacto que salga de este consenso. A nivel programático tenemos muchos puntos en común. Hay otros que son diferentes, pero no por eso no podemos sumar. Podemos hacer un gran proyecto de ciudad para estos cuatro años".
De esta manera, las tres formaciones escenifican un acercamiento después de una semana marcada por los desencuentros. Por un lado, afeaban al PSPV su indefinición y le instaban a mover ficha, más allá de los encuentros convocados por la alcaldesa en funciones, Amparo Marco, con todos los grupos municipales. Por otra parte, Compromís intentaba tomar la iniciativa convocando a la confluencia a una reunión en la que no se llegó a fraguar ninguna alianza a dos bandas, puesto que Unides Podem-CSeM-EUPV ha optado por mantener un perfil propio de cara a la negociación con los socialistas. Finalmente, las conversaciones se han iniciado este lunes a propuesta del PSPV, que ha convocado a sus eventuales socios por separado.
El PSPV, como fuerza más votada, tiene en su mano la formación del nuevo gobierno municipal. Hasta ahora, no ha definido explícitamente su preferencia, pero los hechos hablan, aunque oficialmente no se cierre ninguna vía. "Hoy (por este lunes) lo que hacemos es sentarnos con la confluencia y Compromís. Es un hecho y evidencia por dónde podrán ir los tiros, pero no nos vamos a cerrar ninguna puerta. Hay que dejar avanzar las negociaciones. Nos levantamos de la mesa con buena sensación y eso es positivo para todos los que pensamos en un gobierno progresista, pero todavía no podemos cerrar ninguna puerta. No estamos en disposición de eso", ha señalado Simó a preguntas sobre un posible acuerdo con Ciudadanos.
En cualquier caso, la negociación para reeditar el gobierno de izquierdas sigue su curso. Las partes se han emplazado para continuar con las conversaciones esta semana, aunque todavía no se ha concretado la agenda de reuniones. El único encuentro que ya tiene fecha es el del PSPV y Unides Podem-CSeM-EUPV este miércoles. Volverán a reunirse después de que la confluencia someta este martes a evaluación de su asamblea las líneas de negociación.
En principio, se prevé que continúen las reuniones bilaterales, en especial para hablar del reparto de competencias municipales, y que se inicien también las conversaciones a tres bandas para abordar cuestiones programáticas.
La comisión negociadora del PSPV está formada por David Donate, Rafa Simó, Omar Braina, Isabel Granero, Jorge Ribes, Mónica Barabás, Fabrizio Muzzati y Ramón Marín. Por su parte, Compromís ha designado a Verònica Ruiz, Joan Antoni Ginés, Pau Sancho y Núria Balaguer como integrantes de la mesa; y la confluencia cuenta con Salomé Agudo, Iñaki Vallejo y Jordi Pascual.