la empresa 'casi centenaria' remodela sus instalaciones por cuarta vez
La firma Llusar ampliará su central hortofrutícola de Xilxes tras rozar los 50 millones de facturación
23/11/2018 -
CASTELLÓN. La empresa hortofrutícola Antonio Llusar ampliará por cuarta vez sus instalaciones de Xilxes para dar respuesta a la creciente producción y comercialización de cítricos. La mercantil fundada hace casi un siglo tramita ante la Generalitat la correspondiente autorización administrativa para expandir su central hortofrutícola con una nueva nave de 3.660 metros cuadrados, con 2.650 metros más de patio, anexa a la ya existente. De esa manera, ocupará de forma efectiva 17.589 de los 35.211 metros cuadrados del actual recinto empresarial, ubicado entre la calle Pedro Roque Melchor y la Autopista del Mediterráneo AP-7.
En el proyecto técnico, la compañía justifica la “imperiosa” necesidad de ampliar su central hortofrutícola “por el incremento y mejora de la producción”, que “propiciará un aumento de la oferta de empleo en Xilxes” para ampliar su actual plantilla de unos 235 empleados.
Las actuales instalaciones constan de un muelle de carga y descarga en las fachadas anterior y posterior, así como varias naves adosadas de siete metros de altura. En su interior se distribuyen las cámaras frigoríficas, la cámara de preenfriamiento, el laboratorio y el área de oficinas. La empresa pretende dedicar la ampliación a mejorar el proceso y la capacidad de manipulación de la fruta.
La empresa Antonio Llusar construyó la central hortofrutícola de Xilxes en 1996 con una superficie de 8.365 metros cuadrados para ampliar la actividad que hasta entonces había desarrollado en La Vilavella. En el año 2000 ejecutó una primera extensión de las instalaciones que se repitió en los años 2002 y 2015, junto a la remodelación de las oficinas hasta su actual apariencia semiacristalada. Tras la posterior demolición de los muelles de la planta baja, la central hortofrutícola quedó en los 11.279 metros cuadrados actuales.
La empresa gestiona en sus instalaciones de Xilxes la recepción de la fruta, la inspección de calidad, el posterior proceso de desverdización, la conservación frigorífica, la línea de manipulación y, por último, la expedición de los cítricos a los diferentes destinos mayoristas.
La expansión de la central hortofrutícola llega en un momento de estabilidad económica en la empresa. Antonio Llusar facturó el año pasado 49.892.420 euros, un 2,37% más que en 2016 y muy similar a la de ejercicios anteriores, con un beneficio de 3,5 millones de euros.