CASTELLÓ. La incorporación de Salomé Pradas como dos en la candidatura de la alcaldable del PP por Castelló, Begoña Carrasco, no coge por sorpresa a nadie en la agrupación local. Tampoco a los seis concejales del grupo municipal. La oficialidad este lunes no hace más que confirmar lo que era un secreto a voces y que se venía comentando en los mentideros populares desde hace semanas, especialmente en los grupos de WhatsApp.
Ahora bien, no por esperada, la maniobra genera algunas interrogantes en cargos orgánicos e institucionales. Varias fuentes consultadas por este diario admiten que incluso circulan distintas teorías respecto al fichaje de la senadora, cuya etapa en la política municipal se daba por cerrada en 2019 después de concurrir a los comicios de 2015 como número cuatro en la lista de Alfonso Bataller.
Pradas tiene una gran sintonía y la total confianza tanto de la presidenta del PPCS, Marta Barrachina, como del exalcalde y expresidente de la Generalitat, Alberto Fabra, el hombre fuerte del líder nacional, Núñez Feijóo, en la provincia. Según las mismas fuentes, ese respaldo habría llevado a Carrasco a claudicar ante la imposición de la asambleísta como su segunda.
A partir de aquí, las interpretaciones sobre el papel de la senadora apuntan en dos direcciones, en función de los resultados que obtenga el Partido Popular el 28M. Carrasco, que afronta sus segundas elecciones como alcaldable, ha comentado en más de una ocasión a sus más allegados que, en caso de no gobernar en el Ayuntamiento de la capital de la Plana, dará un paso al lado. Así lo aseguran algunas voces dentro de la agrupación local. En este supuesto, Pradas se perfilaría como su sustituta como portavoz del grupo municipal en la oposición.
El otro escenario que maneja el PP sitúa a la senadora en la Diputación Provincial. Un hipotético triunfo en Castelló ciudad para volver a gobernar (en solitario o con Vox) contribuiría de manera decisiva a recuperar la entidad supramunicipal. De darse la carambola, la alcaldía de la citada Carrasco serviría como trampolín a la parlamentaria para convertirse en vicepresidenta, con Barrachina como presidenta, en la institución de la plaza de las Aulas.
Con independencia de esas tesis, en boca de muchos populares, lo que sí está decidido es que los concejales que han mostrado a la alcaldable su voluntad de repetir en la candidatura (Sergio Toledo, Vicent Sales, María España, Juan Carlos Redondo y Susana Fabregat) formarán parte de ella cuando se haga oficial entre marzo y abril. La semana pasada la líder popular confirmó a los ediles que cuenta con ellos para la lista, aunque no les aclaró en qué posición irá cada uno. Tampoco desveló sus planes respecto a los dos independientes.
En 2019, Carrasco incluyó a sus dos refuerzos en los puestos 3 (Justo Vellón) y 5 (Fabregat). El orden del resto de posiciones hasta completar las 10 primeras lo estableció de la siguiente manera: Sales (2), Toledo (4), Redondo (6), España (7), Vicente Guillamón (8), Maica Hurtado (9) y Paz Aledón (10). La dimisión de Vellón, presidente del CEEI Castellón, propició que se moviera la lista para que entrara como regidor el octavo, ya que el PP consiguió siete representantes.