Fotos: Antonio Pradas
CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló impulsa el plan urbano para el desarrollo residencial del entorno del colegio Soler i Godes. Se trata del área comprendida en tres anexos específicos: uno, entre el propio centro educativo y el parque Pont de Ferro, para completar la urbanización semivial; el segundo, en la calle Marqués de Salamanca (zona de influencia de la unidad Donoso Cortés); y el tercero, desde la avenida Quevedo, a fin de solucionar los accesos y servidumbres existentes.
La licitación para elaborar la dirección de obra y la coordinación de seguridad, adjudicada a Getec Soluciones de Ingeniería por alrededor de 50.000 euros, marca un punto de inflexión. El objetivo último radica en completar los viales y ejecutar los distintos servicios básicos (alumbrado público, aceras o alcantarillado) con vistas a facilitar la construcción de viviendas, independientemente de su tipología.
Las actuaciones de urbanización corren a cargo de los propietarios de los terrenos, la práctica totalidad constructoras, cuya pretensión pasa por impulsar en 2022 promociones para revitalizar el distrito. Sin ir más lejos, la unidad de ejecución está pendiente desde 2016, cuando el pleno acordó, en sesión celebrada el 31 de marzo, declarar resuelto el contrato suscrito con la empresa Bigeco al objeto de materializar el programa de actuación integrado.
En esta línea, y según establece el informe de necesidad, con la finalidad de dar cumplimiento a ese acuerdo plenario, resulta imperativo redactar el proyecto de urbanización ajustado a la coyuntura actual, toda vez que el entorno del Soler i Godes comenzó a desarrollarse en 2005, aproximadamente. Dada la multiplicidad de tareas, el ayuntamiento considera imprescindible la contratación de una empresa o consultoría técnica. Ahora, con la culminación del concurso público, se da el paso definitivo para reactivar la zona, que cuenta con distintas parcelas a ambos lados de la avenida Riu Sec, aunque la actuación se focaliza exclusivamente en el área de dominio del colegio. Incluso, existe alguna calle inacabada susceptible de conectar con la avenida Barcelona.
La asistencia técnica para elaborar el programa de urbanización, dirección de obra y coordinación de seguridad consta de dos fases, de acuerdo a la resolución avalada por la Junta de Gobierno Local el 30 de diciembre de 2020. La primera se centra en la redacción de los proyectos, con una duración de medio año. En el mes de inicio se obliga al adjudicatario a presentar el anteproyecto, consensuando la solución adoptada con los servicios técnicos. Tras la aceptación del borrador, se prevé una suspensión del contrato por un máximo de un año con el fin de completar los trámites administrativos hasta el arranque de las obras.
La segunda fase obedece a la dirección facultativa, que abarca un periodo de 9 meses, incrementado en el tiempo necesario para la recepción de la actuación vinculada. En este lapso también se contempla la coordinación de seguridad y salud, así como la liquidación una vez transcurrido el plazo de garantía. En realidad, los trabajos previstos tienen un mayor calado a consecuencia de su complejidad. Así, incluyen desde el estudio, cálculo y diseño de las instalaciones (alumbrado, red eléctrica, gas, telefonía o drenaje), pasando por la topografía, certificaciones y plan de control de calidad, hasta gestión de residuos.
La urbanización del entorno del colegio Soler i Godes se enmarca dentro del plan de recuperación de unidades de ejecución, que afloraron en la época del boom inmobiliario, pero que sufrieron una paralización a raíz de la crisis económica. Es el caso, por ejemplo, del Senillar y Perpetuo Socorro, cuyos programadas de urbanización están actualmente en marcha tras lustros en el olvido.
El espacio comercial más emblemático de Castelló sopla las velas de sus tres cuartos de siglo desde aquel 21 de diciembre de 1949 en que fue bendecido por el arcipreste Balaguer. Ahora afronta su más importante remodelación, que desde enero de 2026 obligará a un traslado temporal de sus puestos a una carpa en la plaza Santa Clara