CASTELLÓ. Tal y como han hecho otras muchas entidades públicas, la Autoridad Portuaria de Castellón ha lanzado un plan de contingencia para enfrentarse a la expansión del Covid-19. El documento, que consta además de dos anexos, está disponible en la página web de PortCastelló y prevé tres escenarios posibles en función de si los contagios afectan a los trabajadores de la entidad y a su entorno. La última de estas tres hipótesis contempla incluso el cierre de los muelles para tratar de evitar la expansión de la enfermedad.
Para una mejor aplicación, PortCastelló ha trasladado el plan de contingencia a la comunidad portuaria (las empresas e instituciones que realizan trabajos en los muelles del Grau) con el fin de que conozcan las medidas que ya ha implementado la institución pública. Entre estas medidas se encuentra la de facilitar el teletrabajo, algo que se implantará "en función de las posibilidades de los diferentes departamentos", señalan fuentes de la Autoridad Portuaria.
Además, se ha creado un comité de seguimiento del plan de contingencia, formado por la directora del puerto, la jefa del departamento de Sostenibilidad, el del área de Infraestructuras, la de Operaciones Portuarias y el de Recursos Humanos.
Junto a todo ello, uno de los dos anexos enviados por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana recoge los países con evidencia de contagio comunitario. Estos son China (todas las provincias, incluyendo Hong Kong y Macao), Corea del Sur, Japón, Singapur, Irán, Tailandia, Taiwán e Italia (en concreto las regiones de Lombardía, Véneto, Emilia-Romaña, Piamonte). Con las personas procedentes de estas zonas es con las que hay que ser especialmente cuidadosos en el contacto, señala el documento.
Hasta este momento, las actividades de estiba y desestiba se desarrollan "con total normalidad", apuntan las fuentes de la Autoridad Portuaria. Y es que, aunque varias rutas unen el puerto de Castellón con zonas cercanas a las que hay evidencia de contagio comunitario (por ejemplo el puerto de Génova, muy cercano a la provincia del Piamonte), desde la entidad señalan que los capitanes de los buques han de comunicar a las capitanías marítimas donde atraquen el estado de la tripulación, como por ejemplo si hay alguien enfermo.
A pesar de ello, en el colectivo de estibadores echan en falta alguna medida para regular el contacto con las tripulaciones, de procedencia siempre muy diversa, máxime cuando el Gobierno incluso ha prohibido ya la entrada a puerto de buques de pasajeros italianos. De momento tan solo se les ha trasladado información básica sobre seguridad y el uso de mascarillas. Además, se ha eliminado el pase presencial de lista y se comunica el lugar de trabajo a través del móvil con el fin de no coincidir en un espacio cerrado.
