'No es país para viejos'CASTELLÓ. Cinemascore regresa al Paranimf de la UJI con una nueva programación que anima a disfrutar de la música, pero sobre todo, del cine en pantalla grande. En 2021 los cines de la Comunitat Valenciana perdieron un sesenta por ciento de espectadores, con respecto al número de visitantes que hubo antes de la pandemia. Pero además, según datos del Anuario SGAE 2022, la media de asistencia a las salas por habitantes no alcanzó ni una sesión al año. En consecuencia, muchos cines han tenido que reducir su cartelera y el 28 por ciento se encuentra en riesgo de impago, de acuerdo a unos datos ofrecidos por la empresa Insight View. Ahora bien, en este contexto de crisis, en el que el consumo audiovisual se ha impuesto, sigue habiendo proyectos que llaman a reencontrarse con el séptimo arte.
Lleva Cinemascore 18 ediciones acompañando películas clásicas y también de reciente creación de las bandas sonoras que diferentes músicos han creado expresamente para su proyección en Castelló. El Paranimf se convierte, del 2 al 5 de febrero, en un cine y un auditorio donde diferentes artistas interpretan en directo su particular y exclusiva versión sonora de la película que se reproduce en pantalla. Este año el encuentro, organizado desde el Aula de Cine y Creación Juvenil de la UJI y la promotora Born Music, ha propuesto acompañar de nuevos sonidos Gattaca (1997, de Andrew Niccol), No es país para viejos (2007, de Joel & Ethan Coen), Nomadland (2020, de Chloé Zhao) y My Mexican Bretzel (2019, de Nuria Giménez). Unas BSO que tocarán en directo Santi Campos, Kokoshca, Club del Río y Zabala.
La muestra arrancará con la versión que el músico de Castellón Santi Campos ha preparado para la historia distópica de Gattaca. En una sociedad futura, donde la mayoría de bebés son concebidos in vitro y con técnicas de selección genética, Vicent -uno de los últimos niños concebidos de manera natural- nace con un problema cardiaco y con una esperanza de vida de solo treinta años. Esto hace que se le considere un inválido y que se le den los trabajos más desagradables, pero Vicent sueña con viajar al espacio y hará todo lo posible por lograrlo.
"El proyecto me tiene obsesionado", comenta por su parte Santi Campos, quien pondrá música a este film que originalmente ha musicalizado Michael Nyman. Lleva el castellonense toda la vida dedicado a la música, tratando de desligarse del patrón de rock tradicional para trastear con el pop y el folk y proponer unos repertorios muchos más complejos.
A los pamploneses Kokoshca se les ha planteado un reto serio: poner banda sonora a No es país para viejos. El film de los hermanos Coen ganó en 2007 cuatro premios Óscar a Mejor película, Mejor director, Mejor guión adaptado y además, Mejor Actor Secundario, premio que recayó en Javier Bardem. En este sentido, la banda de rock y pop tendrá que dar otra vuelta de tuerca a un trabajo del que mucho se ha hablado. "Ya consolidados, Kokoshca se enfrenta a No es país para viejos, una contundente historia fronteriza ingeniada por el implacable Cormac McCarthy y llevada al cine con absoluta maestría por los siempre geniales hermanos Coen. Una aventura mayúscula de resultado imprevisible pero que, con absoluta seguridad, será estimulante", señalan desde la organización.
De la huida que emprende el personaje de Josh Brolin para escapar de las garras del salvaje asesino encarnado por Javier Bardem, Cinemascore pasa a la mirada delicada y poética de Chloé Zhao. Nomadland, su tercer largometraje, documenta la vida de una mujer que enlaza trabajos temporales en distintas partes del país y pasa sus días en una caravana sin tener un hogar establecido. A pesar de este futuro incierto, su protagonista, encabezada por Frances McDormand, trata de encontrar la felicidad por el camino. Del film, que también fue multipremiado en los Óscar y en los BAFTA, se destaca su belleza y sensibilidad.
Por su parte, Club del Río también dibuja un folk luminoso y optimista, lleno de matices y de influencias, que bien puede encajar en la historia de Nomadland. "Club del Río es magia, es alegría, es una ventana abierta, es un lugar maravilloso donde se reúnen seis músicos de Madrid y es aire libre donde la música fluye sin ataduras. Club del Río somos nosotros, vosotros y ellos, es la energía que nos ayuda a empezar los días. Es, posiblemente, el grupo donde nos gustaría vivir, tocar y reír, pasar los días y mirar el río, en su amplitud, en su discurrir". Ludovico Einaudi pone música a la BSO original.
La cita cerrará con la propuesta del músico Zabala, más conocido como Jon Aguirrezabalaga. Tras una larga trayectoria en las filas del extinto We Are Standard, el compositor y productor bilbaíno ha emprendido un nuevo camino en solitario para crear su obra más personal. Un trabajo en el que se zambulle en géneros electrónicos como el ambient, el IDM o el drone, y que compagina con sus otras pasiones: las artes escénicas y el cine.
En esta nueva etapa, el artista vasco ha recibido además la propuesta de interpretar en directo la banda sonora del documental My Mexican Bretzel. La película cuenta la historia de Vivian Barret, una mujer aburguesada de la vieja Europa, a partir de vídeos encontrados de la época y de su propio diario. "En su nueva posición de alquimista de la electrónica más orgánica, el artista vasco es capaz de jugar con los límites de lo onírico y lo real abriéndose camino hacia territorios de una belleza inusual y extraña que comulgan perfectamente con el found footage que Nuría Giménez convirtió en esa maravilla que es My Mexican Bretzel", avanza la organización.
